El Partido Popular promueve la anticorrupción en Europa

Los populares mandan un recado a Artur Mas. En su programa para las elecciones europeas abogan por "la unión y no por la dispersión" e insisten en que van a defender "la integridad territorial de los Estados miembros".

El paro y la corrupción son, según el CIS, los principales problemas para los españoles. Esta semana en el Congreso se han examinado las medidas anticorrupción remitidas por el Gobierno y el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha denunciado la falta de medios, recursos y medidas legales para combatir las actuaciones irregulares.

En medio de este escenario el Partido Popular presenta su programa electoral para las europeas. Lo hará el próximo lunes, en Barcelona. Al acto no acudirá Mariano Rajoy. El candidato popular, Miguel Arias Cañete, será el encargado de hacer los honores

En este programa los populares tratan ambos temas. El PP, salpicado desde hace años por el 'caso Gürtel' y sometido a continuos terremotos internos por las acusaciones de Luis Bárcenas, dice que va a "promover campañas comunitarias para fomentar la denuncia de actividades fraudulentas o corruptas".

También sostiene que va a trabajar con los socios europeos "para mejorar la respuesta de los distintos ordenamientos jurídicos a las conductas delictivas constitutivas o relacionadas con la corrupción". Y, por último, que apoyará la creación de "una fiscalía europea para defender los intereses financieros de la Unión y luchar contra la corrupción, el blanqueo y la evasión de capitales".

En el resumen del programa, al que ha tenido acceso la Cadena SER, el PP subraya que ahora a los gobiernos se les reclama "legítimamente un comportamiento fuera de toda duda". Y recupera el último informe anticorrupción de la Comisión para recalcar que la corrupción por sí sola tiene un costo estimado para la economía comunitaria de 120 mil millones de euros al año, tan solo un poco menos que el presupuesto anual de la Unión. Por eso mismo, los populares consideran que "ahora más que nunca se requiere transparencia en el gasto o integridad en el desempeño del ejercicio público".

En cuanto al empleo, el PP asegura que es su prioridad. En el documento afirma que "la situación más complicada" a la que tuvo que enfrentarse al llegar a La Moncloa fue a "la dramática" tasa de paro que afectaba a más de cinco millones de españoles. En la actualidad, hay cerca de un millón más de personas desempleadas.

El programa se va a "regionalizar", es decir se le va a dar espacio a cada Comunidad Autónoma. Se vuelve a criticar la herencia recibida y se mantiene que el Ejecutivo del PP ha sacado a España del abismo. En el texto comentan que han respondido "con eficacia" a los problemas de los españoles y que nuestro país cuenta con un Gobierno "fuerte, de ideas claras".

Entre las medidas propuestas hay un guiño a las víctimas del terrorismo. El PP dice que va a "impulsar una carta europea que contemple sus derechos" pero no hace ni una sola mención a la doctrina Parot.

Recado a Mas

También en este documento se insiste en un mensaje. Hasta en dos ocasiones, hablando de Europa, se resalta lo importante que es "la unión y no la dispersión". "Necesitamos una España fuerte y unida para que se escuche nuestra voz", figura en el texto como claro recado a Artur Mas.

Los conservadores consideran fundamental "mantener la integridad territorial de los Estados miembros" y proclaman que es "un principio irrenunciable". También comentan que el PP cree "en el valor de la unión frente al aislamiento".

Por último, el PP trata de evitar que sus fieles votantes apoyen en esta convocatoria a otros partidos como Vox. Para ello hace hincapié en que el Partido Popular Europeo, del que forma parte, es la formación que cuenta en la actualidad con la representación mayoritaria en Bruselas, "a diferencia de otros sin influencia alguna en Europa". Por eso ven "necesario y útil" que los ciudadanos apuesten por sus siglas y no por otras. Se venden como "la opción fiable y que mejor defiende los intereses de toda la sociedad española".

El PP además habla de "la erradicación de la pobreza y la exclusión social". "Objetivos prioritaritos, especialmente cuando se trata de luchar contra la pobreza infantil", señala el programa tras haberse conocido hace unos días que España es el segundo país de la UE con más pobreza infantil, superado sólo por Rumanía.

Y después de haber reforzado las vallas fronterizas de Ceuta y Melilla por un importe de más de dos millones de euros, el Partido Popular también habla de la inmigración para decir que la defenderá siempre "vinculada al empleo".

En el Partido Popular están preocupados por la alta abstención y también por el voto de castigo que pueden sufrir tras los recortes y subidas de impuestos. Es el primer examen que Rajoy pasa ante las urnas desde llegó a La Moncloa. Y sus colaboradores temen que el incumplimiento del programa electoral les pase factura. El número dos de la lista, Esteban González Pons, decía hace tan solo unos días que su formación se comprometía a hacer todo cuanto había prometido en las generales y que se podría comprobar al finalizar la legislatura. "Los políticos sin programa no merecen el título honroso de políticos. Son otra cosa", dijo Pons.