Cine y TV

¿Cuánto se cobra por aparecer en un photocall?

Personajes televisivos elevan sus cachés para prestar su imagen en eventos o inauguraciones

Hiba Abouk posa en el evento de lencería, después vendría su tenso encuentro con la prensaGETTY

Madrid

No hay semana que no se celebren estrenos de cine, premiers de series, galas de premios, inauguraciones de boutiques de gran exclusividad o fiestas promocionales de cualquier marca. El denominador común de todos estos eventos en la era de la comunicación y la imagen es la alfombra roja. Sobre ella desfilan numerosos rostros conocidos, muchos del mundo de la televisión, que prestan su imagen ante las decenas de fotógrafos que se agolpan e intentan captar la mejor instantánea que vender a las revistas o portales de crónica rosa o sociedad. Los photocalls, un efectivo instrumento promocional que mueve mucho dinero.

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El funcionamiento es sencillo: una marca que quiere promocionar un producto fija un evento. Que acuda prensa, que será la encargada de plagar páginas y páginas con el logotipo de la marca y de hablar de ese evento, dependerá del número y del tipo de rostros conocidos que se congreguen en este evento. Lo más sencillo (no lo más barato), contratar a agencias que convocan a famosos para que hagan acto de aparición en la alfombra roja. El actor, cantante, presentador o personaje famoso de turno también explota el componente mediático de estos saraos: muchos lo consideran una promoción para sus carreras.

La agencia encargada de la convocatoria de famosos cobra una cantidad -no suele bajar de los 4.000 o 5.000 euros- a su cliente que va desde una distribuidora de cine, una cadena de televisión, una marca de ropa interior femenina, de joyas, de refrescos... Entre sus servicios más básicos suelen requerirse los de "llevar famosos" y "llevar prensa". Es todo lo que necesita el cliente para su acto de promoción.

Como en todo, hay clases. La afluencia de medios y el espacio que luego se dedica en revistas o portales a estos eventos viene muy determinado por la calidad del famoseo que se deja ver por la alfombra roja del sarao. Así, una reciente ganadora de un Goya como Candela Peña atrae mucho menos el interés mediático en este tipo de convocatorias que la última novia de torero que suela aparecer en el papel cuché.

Plagar un photocall de rostros conocidos es relativamente sencillo, pues muchos artistas lo toman como una parte más de su trabajo y no faltan a ninguno. Si se trata de la presentación de una serie, por ejemplo, la cadena de televisión y la productora se mueven para conseguir que la mayoría de los rostros conocidos de su parrilla acudan a esa presentación. En el estreno de 'El Príncipe' o de 'B&b, de boca en boca' se pudo comprobar lo bien que trabaja Mediaset en estos temas de comunicación corporativa: todas las estrellas y rostros del grupo aparecieron por la alfombra roja.

Cachés de miles de euros por posar unos minutos

Aparecer en photocall es el anhelo para muchos artistas que empiezan a fraguarse un hueco en el panorama mediático. Jóvenes actores de series sin demasiado currículum esperan con entusiasmo la invitación a algunos de estos eventos. Sus representantes intentan que estas agencias de organización de eventos los incluyan en su lista de posibles invitados vip.

Lo usual en un photocall es que los famosos que pasan por él no cobren. Se entiende aquello como una relación de simbiosis: el cúmulo de famosos beneficia el eco mediático del evento mientras que cada uno de ellos incrementa su cuota de fama que le puede reportar nuevos proyectos laborales.

En otros casos y dado el interés que despiertan determinados personajes en cierto tipo de prensa rosa o de sociedad, su presencia frente a los fotógrafos no es casual ni espontánea. Tienen un caché que la marca organizadora del evento ha de pagar.

Según un reportaje publicado por el suplemento La Otra Crónica (LOC) del diario El Mundo, los cachés varían bastante. Así, por ejemplo, el último fichaje de la serie 'B&b, de boca en boca', el top model internacional Andrés Velencoso se embolsa por cada photocall que pisa 35.000 euros. Lógico también si se tiene en cuenta que el catalán ha posado para Chanel, Louis Vuitton, Loewe o Jean Paul Gaultier entre otras marcas.

Blanca Suárez, protagonista de la serie 'El barco' y la última chica Almodóvar, tiene actualmente un caché de 30.000 euros. Aunque según afirma LOC aún nadie lo ha pagado ya que es el triple de lo que pedía hace un año por acudir a este tipo de citas.

Pilar Rubio también ha elevado su caché. Su relación con el futbolista del Real Madrid ha incrementado el interés que despierta para la prensa del corazón y la ex reportera de 'Sé lo que hicisteis...' se embolsa unos 20.000 euros por photocall. Similar es el caché de su excompañera de programa Patricia Conde: 18.000 euros por photocall. Esta misma cifra es la que ha estado percibiendo Belén Esteban, que ha cobrado hasta 18.000 euros por posar.

Rubén Cortada, modelo que como Velencoso anda reconduciendo su carrera hacia la interpretación, pide 15.000 euros por pasar por el photocall de un evento. Protagonistas de la serie 'El Príncipe' está rentabilizando bien el tirón de esta ficción de Mediaset. Como su compañera Hiba Abouk cuyo caché oscila entre los 6.000 y 8.000 euros por aparición. Como recuerdan en LOC, Hiba Abouk ha pasado en cuestión de tres meses de acudir gratis a bastantes de estos saraos a hacerlo de manera puntual y cobrando un alto caché.

Aún así, a Hiba le molesta responder a las preguntas sobre su vida privada que le formulan en este tipo de eventos. Similar le ocurre a la actriz Úrsula Corberó. Saltó a la fama a nivel nacional por ser una de las protagonistas de 'Física o química'. En aquella época, Úrsula era una de las fijas en cualquier photocall de Madrid. Acudía sin ningún tipo de pretensión económica y con una gran sonrisa. Seis años después, Úrsula ha engordado su currículum con apariciones en otras series y películas. Su relación sentimental con Andrés Velencoso ha incrementado su caché hasta los 12.000 euros por photocall, tal y como apunta LOC.

La ex presentadora del programa 'Gente' de TVE, Sonia Ferrer, pide unos 9.000 euros por aparición en photocall. Su paso como concursante de 'Mira quién salta' (Telecinco) el año pasado le fue muy provechoso. Además de volver a la televisión, Sonia comenzó una relación con el jinete Álvaro Muñoz Escassi que puso sobre ella el foco del interés de la prensa del corazón. Sonia cobra ahora 3.000 euros más que hace un año por aparecer en un photocall.

Adriana Ugarte, aplaudida por su interpretación en 'El tiempo entre costuras', establece su caché en unos 8.000 euros, similar al de Carolina Cerezuela ('Camera café'). Dani Rovira se ha convertido en uno de los hombres del momento tras el éxito de 'Ocho apellidos vascos' y siendo uno de los personajes más queridos de la serie 'B&b'. Su supuesta relación con la actriz de la película Clara Lago ha generado un mayor interés en el andaluz que, según LOC, ahora cobraría 4.000 euros por aparecer en un photocall.

Evidentemente, ni estos son los únicos rostros televisivos que exigen cantidades por aparecer en eventos ni siempre que éstos aparecen lo hacen cobrando estas cantidades. En ocasiones, al tratarse del proyecto de un amigo o compañero o para apoyar al sector del cine o la televisión, acuden a posar delante de los fotógrafos de una manera desinteresada.

El photocall, la alfombra roja, el foco y las cámaras. Un negocio que mueve mucho dinero y abrillanta los egos. Los agencias de representación y management se afanan para que sus representados se paseen por estos eventos desde que se inician en una serie o programa de televisión y son prácticamente irreconocibles para el gran público. Si el interés mediático se va incrementando, podrán pasar al nivel final: cobrar por ello. Gana el famoso, su agente, los organizadores del photocall y la marca que los contrata para promocionarse. Bienvenidos al business show.

 
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