El PP gobernaría en más capitales de provincia que ahora
Con la elección directa de alcalde y aplicándola a los resultados de las europeas habría 44 regidores populares por 38 logradas en 2011. Mantendrían Madrid y Valencia. ERC gobernaría en las cuatro capitales catalanas
La reforma electoral que plantea el PP, que conllevaría la elección directa del candidato a alcalde más votado aunque no obtuviese mayoría absoluta, otorgaría a los populares más regidores en las capitales (las de provincia, las ciudades autónomas, Mérida y Santiago) que los que tiene en la actualidad, fruto de su aplastante victoria en los comicios de mayo de 2011.
Más información
Si se aplica la elección directa a los resultados de las europeas (en las que el PP obtuvo el 26% de los votos y 16 de los 54 eurodiputados españoles) en cada municipio, el partido en el Gobierno controlaría 44 de las 54 capitales, por 38 que administra a día de hoy. Nunca ha tenido tantos alcaldes en las grandes ciudades.
El PP mantendría así Madrid y Valencia a pesar de perder la mayoría absoluta en sus dos buques insignia. También controlaría todas las capitales gallegas y Vigo. Actualmente solo gobiernan en dos, A Coruña y Santiago, las únicas en las que tienen más de la mitad de los concejales. La suma de votos de PSdeG, BNG, AGE y Podemos dejaría a los populares fuera de todas las grandes ciudades de Galicia, uno de los feudos tradicionales del partido de Fraga, Feijoó y Rajoy.
Andalucía, el principal granero del PSOE y fortín de la presidenta de la Junta, Susana Díaz, tendría cinco capitales del PP por solo tres socialistas: Huelva, Málaga y Sevilla. Los populares andaluces perderían la mayoría absoluta que tienen ahora en las ocho ciudades, pero mantendrían Almería, Cádiz, Córdoba, Granada y Jaén por ser la lista más votada.
Cataluña protagonizaría un gran vuelco electoral. Esquerra Republicana sería el partido con más apoyo en las cuatro capitales (actualmente no gobierna en ninguna), lo cual les otorgaría las alcaldías automáticamente con la aplicación de la idea del PP. En las principales ciudades vascas todo seguiría igual, aunque en Vitoria el margen del PP sobre Bildu es escasísimo, y se acabarían los pactos PP-PSE para evitar que gobernase la izquierda abertzale en muchos municipios de menor tamaño.
Las elecciones europeas son la única muestra hasta ahora que permite analizar a nivel municipal la caída de los dos grandes partidos (aunque sin un posible efecto Pedro Sánchez) y la irrupción de Podemos, partido a quien en sondeos y barómetros del CIS posteriores se le otorga un impacto todavía mayor que los 1,2 millones de votos que logró el pasado mayo.