El último demarraje de Lance Armstrong

Madrid

Lance Armstong vuelve al ataque. Y no en el Tourmalet, la mítica cima que este miércoles suben los ciclistas que participan en el Tour de Francia, sino en las redes sociales. El tejano se destapó en la noche del martes con un mensaje que pone en duda la limpieza de Chris Froome, el hombre que en La Pierre-Saint-Martin asestó un golpe brutal al resto de los favoritos a la victoria final.

“Claramente, Froome, Porte y el Sky están muy fuertes. ¿Demasiado para estar limpios? No me preguntéis. No tengo la clave”. Así se expresó horas después de la victoria del británico en la décima etapa del Tour, de la que salió reforzado en su condición de líder de la clasificación general. Ahora mismo, Froome tiene una ventaja de 2:52 respecto a Van Garderen (BMC), de 3:09 sobre Nairo Quintana (Movistar) y de 4:01 con Alejandro Valverde (Movistar). Alberto Contador está a 4:04 del maillot amarillo.

No tardó Armstrong en acaparar las críticas de aficionados a través de las redes. Quizá eso es lo que le llevó a aclarar después de su comentario inicial que no estaba “acusando a nadie” de dopaje. “De hecho, es todo lo contrario. No estoy interesado (no tengo credibilidad) para opinar de eso”, dijo.

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El excampeón quiso zanjar así esta polémica, pero probablemente siga ofreciendo su análisis de la carrera a lo largo de todo el Tour. Ayer mismo señaló que el primer contacto con la montaña siempre es “impredecible”, como lo son también los días posteriores a los de descanso. Ayer, la combinación de ambos acabó con la exhibición de Froome.

Este miércoles sus rivales tendrán ocasión de medir sus fuerzas en la undécima etapa, en la que se suben el col d’Aspin, de primera categoría, y el Tourmalet, de categoría especial. El puerto está a 41 kilómetros de la meta, situada en el alto de Cauterets, de tercera categoría.