El Gobierno anuncia la creación de una comisión interministerial para gestionar la acogida de refugiados

Madrid

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha anunciado la creación de una Comisión Interministerial para analizar la acogida de refugiados en España, “uno de los grandes retos que tiene la UE”.

Este grupo de trabajo estará presidido por la propia vicepresidenta y comenzará a ponerse en funcionamiento a partir del lunes, cuando tendrá lugar la primera reunión plenaria. Sáenz de Santamaría ha pedido la cooperación y colaboración de todas las comunidades autónomas. "Queremos trabajar juntos para ver qué capacidades tenemos y cómo articular un sistema que respete la legalidad internacional", aseguró la vicepresidenta cuando se le preguntó por las iniciativas de acogida adoptadas por varias comunidades y municipios. "Todas las Administraciones españolas tenemos que trabajar coordinadamente; no es un problema de hoy ni de mañana, lo vamos a tener que gestionar a corto, medio y largo plazo. Esta debe ser una política de Estado".

La primera medida que adoptará será la convocatoria de la Conferencia Sectorial de Migraciones, en la que estarán presentes las comunidades autónomas y la Federación de Municipios (FEMP). 

Sobre el volumen de refugiados que debería acoger España en opinión del PSOE, defendió que se eviten las "frases fáciles ante problemas difíciles". "Con las cifras que está hablando Naciones Unidas, fíjese donde queda la cifra del PSOE", agregó la número dos del Ejecutivo.

Llama a Mas a la responsabilidad

La vicepresidenta del Gobierno ha hecho un llamamiento a la "responsabilidad" del presidente de la Generalitat, Artur Mas, a quien ha pedido que deje "de engañar a los catalanes" con un proceso de independencia que "ni se puede ni se va a producir".

Después de que Mas haya dicho que seguirá adelante con el proceso soberanista si obtiene una mayoría absoluta de escaños, aunque no sea en votos, Saénz de Santamaría, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, ha considerado que el presidente de la Generalitat se sitúa en la dirección contraria "al signo de los tiempos".

Tras insistir en que es difícil negociar con quien no está dispuesto a cumplir la ley, la número dos del Ejecutivo ha reprochado a Mas que esté trasmitiendo a los ciudadanos un proceso "que sabe que no va a llegar a ningún puerto" y que "cada vez está más debilitado", como demuestra con sus propias manifestaciones.

Un proceso que -ha recalcado- no le afecta sólo a él, sino que está generando "desgarro" y "desazón" entre los ciudadanos catalanes.