Nadal y Feliciano sobreviven

No parecía ser una jornada fácil para el tenis español en el Masters 1000 de Shanghai y, efectivamente, no lo fue. Cuatro españoles entraban en liza en esta jornada de miércoles para colarse entre las dieciséis mejores raquetas del evento chino, con Albert Ramos ya clasificado desde el martes para octavos de final tras sorprender a Roger Federer en el debut del helvético en el torneo, y todos se enfrentaban a rivales complicados.

El primer jugador en entrar en escena fue David Ferrer, que inauguraba la jornada en la Grandstand, la segunda pista en importancia. Bernard Tomic, la vigésima raqueta del ránking mundial, se encontraba con 1-3 en contra en el cara a cara ante el tenista de Jávea, pero su único victoria había llegado en un 2015 que ha visto la mejor versión de este australiano de padre croata nacido en Stuttgart. El aussie, al igual que en Indian Wells, batió al alicantino sin ceder un parcial (6-4 y 6-2).

Roberto Bautista fue el siguiente tenista nacional en bregar sobre el cemento chino, en la misma pista precisamente en la que Ferrer había cedido antes. Su rival, el canadiense Milos Raonic, aterrizó en esta gira asiática con la necesidad de sumar muchos puntos para, por lo menos, acudir al torneo de maestros de Londres aunque fuese como suplente. El castollenense a punto estuvo de dar la campanada, estando a tan sólo dos puntos del triunfo, aunque finalmente cedió por un estrecho margen en el desempate de la tercera manga. 6-4, 6-7(3) y 7-6(5) fue el marcador final, favorable para el número uno de Canadá.

De manera prácticamente simultánea saltaron a la pista Feliciano López y Rafael Nadal. Rivales en la segunda ronda de Shanghai en la segunda ronda de 2014, en esta ocasión sudarían tinta china para conseguir su billete hacia los octavos de final. El toledano estuvo set y break abajo ante el austriaco Dominic Thiem, pero consiguió revertir la situación para ganar por 6-7(4), 7-6(6) y 6-3 y citarse con un Djokovic en octavos de final que tan sólo se dejó tres juegos ante Klizan (6-2 y 6-1).

El gran partido de la jornada lo protagonizó Nadal, que fue capaz de sobreponerse a los 24 saques directos que le endosó Ivo Karlovic para citarse con el anteriormente mencionado Raonic por un puesto en los cuartos de final. El balear, que estuvo a tres puntos de la derrota, se anotó el triunfo por un marcador global de 7-5, 6-7(4) y 7-6(4), en un partido irregular del mallorquín pero que le permite seguir mejorando de cara a recuperar las sensaciones que le llevaron en su día ser catorce veces campeón del Grand Slam.