'Charlie Hebdo' reivindica la sátira en el aniversario del atentado

Madrid

La revista satírica Charlie Hebdo reivindica su sátira frente al fanatismo religioso en la portada que saldrá a la venta este miércoles, coincidiendo con el primer aniversario del atentado perpetrado en la redacción parisina el pasado 7 de enero. 

Bajo el título Un año después, el asesino sigue corriendo, el ejemplar número 1224 muestra la caricatura de un Dios con un kalachnikov a la espalda y con las manos manchadas de sangre.

Según recoge este lunes el periódico francés Le Monde, la revista de este miércoles incluirá un editorial del director de Charlie Hebdo, Laurent Sourisseau, conocido como Riss y uno de los supervivientes del ataque terrorista, quien asegura que la muerte siempre ha acompañado al periódico. 

En este sentido, comenta que "muchos esperaban" que los "mataran" desde la publicación en 2006 de las famosas caricaturas del profeta Mahoma. Y recuerda que en 2011 sufrieron un primer atentado, cuando sus locales aparecieron incendiados cuando estaban vacíos. 

Años después, unas semanas antes del ataque de enero de 2015, Riss pensaba era innecesario la protección que les habían facilitado: "las historias de las caricaturas eran pasado. Pero la religión desconoce el tiempo. No cuenta en año o en siglos porque sólo cuenta la Eternidad".

"La Eternidad", prosigue, "nos cayó ese miércoles 7 de enero". El director de Charlie Hebdo justifica la continuidad de la publicación del atentado porque todo lo que han vivido a lo largo de los últimos 23 años les da "la rabia" para continuar.

"No serán unos gilipollas encapuchados los que van a echar por tierra el trabajo de nuestras vidas. No serán ellos los que verán morir Charlie. Es Charlie quien los verá palmar".

Su edición especial conmemorativa sacará a la venta cerca de un millón de ejemplares con más páginas y con ilustraciones de los dibujantes actuales de la redacción, pero también de los asesinados el 7 de enero.

También con personalidades destacadas de la cultura como Isabelle Adjani, Juliette Binoche o Charlotte Gainsbourg, intelectuales como Talisma Nasreen, o músicos como Ibrahim Maalouf, además de la ministra francesa de Cultura, Fleur Pellerin.