Castro pide a Obama el fin del bloqueo económico y la salida de Guantánamo

Madrid

El presidente cubano Raúl Castro ha pedido al norteamericano Barack Obama el fin del embargo económico de Estados Unidos a Cuba porque "el bloque es el obstáculo más importante" para el desarrollo cubano: "Su eliminación es esencial para normalizar las relaciones bilaterales", ha explicado Castro en rueda de prensa tras reunirse con Obama en un encuentro histórico en La Habana.

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El mandatario cubano ha agradecido la visita a La Habana del presidente norteamericano y le ha recordado que la presencia norteamericana en Guantánamo con su base naval sigue siendo "un obstáculo" para normalizar la relación de ambos países.

Por su parte, Barack Obama ha destacado que hoy es "un nuevo día" para las relaciones entre ambos países y que está seguro de que Estados Unidos y Cuba seguirá trabajando en los aspectos que les unen. Obama ha destacado que su país cree en la democracia y en los derechos humanos y que seguirán trabajando por "tender puentes", mantener un diálogo y asumir críticas por ambos lados.

Obama ha recordado que su objetivo antes de acabar su mandato es poner fin al embargo económico: "El bloqueo tiene que acabar", ha dicho, aunque estos cambios, ha subrayado, "dependen del Congreso, que no siempre es tan productivo" como al presidente de EEUU le gustaría. Levantar el bloqueo económico a Cuba requiere un voto mayoritario del Congreso y un voto superior a la mayoría en el Senado.

Tensión por los "presos políticos" en Cuba

La rueda de prensa subió de tono tras la pregunta de un periodista norteamericano que espetó a Castro por cuándo iba a "soltar a los presos políticos" de Cuba. Notablemente molesto y algo irónico, el presidente cubano pidió al informador "la lista de los presos políticos para soltarlos". "Si hay presos políticos, antes de que llegue la noche van a estar sueltos", zanjaba el cubano.

Otra de las periodistas presentes en la sala ha preguntado por el respeto a los derechos humanos en Cuba, ante lo que Raúl Castro ha argumentado que "no se puede politizar el tema de los derechos humanos". Tras admitir que, como muchos otros países, Cuba "no los cumple todos", Castro ha soltado al aire si "el derecho a la salud y la enseñanza" acaso no son "sagrados".