Luis Pineda: "Soy el mal"

El presidente de Ausbanc, Luis Pineda, mantuvo un tono desafiante, de reto constante, durante su interrogatorio como imputado ante el juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz. El fiscal Daniel Campos fue quien llevó el peso de la indagatoria, y desde el comienzo, el supuesto líder de la organización criminal evitó contestar a las preguntas muy concretas del representante del Ministerio Público, con la utilización de continuas perífrasis y situándose como una víctima del sistema. En un momento determinado era capaz de asegurar que el BBVA colocaba a individuos armados "con pistolas del nueve largo" a su alrededor en las juntas de accionistas, como llegaba a jactarse de haber librado a la presidenta del Santander, Patricia Botín, de una turbia causa judicial, pero no respondía jamás a los detalles sobre si llegó a pedir dinero a Caja Madrid por retirar la acusación contra Blesa, o si pidió un millón a Unicaja por idéntica acción en el caso de los ERE.Eso sí, admitió durante la sesión en el juzgado que era el único responsable de todo lo que hubiera sucedido en Ausbanc; "soy el mal, yo", añadió en tono jocoso ante el juez, "los demás solo hacen lo que les mande".

La actitud de Pineda provocó el enfado progresivo del fiscal, que tuvo que dar por terminado el interrogatorio sin poder preguntarle respecto a si reclamó tres millones de euros a La Caixa a cambio de que Manos Limpias retirase la acusación contra la infanta Cristina.

El juez Pedraz sostiene que de lo investigado hasta la fecha, Luis Pineda ejercía un “dominio total y completo de la trama". Pineda conformó la organización criminal, según el magistrado, utilizando a diversas personas como testaferros, que "contribuyeron a la consecución de los importantes ilícitos beneficios económicos”. Más de siete millones de euros en tan solo cinco años. Luis Pineda se encuentra en prisión provisional incondicional desde su detención.