Mambo Jambo, la demostración de que lo difícil se puede convertir en una ventaja
El cuarteto vuelve con un pequeño cambio en su composición y nuevo disco: 'Jambology'
Madrid
Los componentes de Mambo Jambo tienen una larga trayectoria musical, juntos y por separado. A finales de 2009 se dieron cuenta de que sus instrumentos ensamblaban a la perfección y decidieron unir fuerzas. Todo el camino recorrido hasta entonces estaba ahí, en ese sonido que ellos denominan Jambofónico y que mezcla rock&roll, swing y rythm&blues de finales de los 50.
La propuesta era arriesgada: hacer un grupo instrumental con sonido clásico en plena ola de música indie. Las dudas saltaban a su alrededor: “Cuando empezamos había mucha gente que decía que les encantaba el grupo pero que por qué no metíamos una cantante. Ahora creo que es una de las características que más nos distingue. Quizá era más difícil pero también ha sido una ventaja. Nosotros tocamos mucho en el extranjero y no tenemos que estar pendientes de ningún idioma, la música es un lenguaje universal”, explica en perfecto castellano el sueco Anton Jarl, el batería del grupo, que cuenta también con un serbio –al contrabajo- y dos barceloneses, a la guitarra y al saxo. Una banda universal con sonido universal. “A mí no me acaba de gustar el estilo de música que hacemos en castellano. Cantando en inglés no nos sentimos cómodos, nos sentimos mucho más cómodos con nuestros instrumentos, sin la esclavitud de un estribillo”, justifica Dani Nel·lo, que toca el saxo como si fuera su propia voz.
Ese sonido jambofónico tiene otra ventaja: en sus conciertos se puede ver gente de todas las edades. Depende mucho de dónde toquen: "Hemos tocado en festivales de jazz, con público más mayor, de rock and roll, con gente de mediana edad aunque en este circuito está entrando mucha gente joven, y también hemos tocado en festivales indie con jóvenes. Tenemos de todo. Nuestro público es muy heterogéneo”, cuentan.
Su punto fuerte son los directos. Allí es donde su música se luce en todo su esplendor, donde demuestran que la experiencia es, de nuevo, una ventaja. Todo fluye, encima y debajo del escenario. Imposible mantener los pies quietos. Salas de medio mundo lo han comprobado. Esta semana viajan a Serbia, en octubre tocarán en Brasil y no olvidan su exitoso paso por México. Además, de todas las salas que ya han recorrido por Europa, la más especial de todas está en Barcelona: el Jamboree Jazz Club tiene 50 años de historia y Mambo Jambo batieron el récord de público de la sala en una ocasión y quieren repetir hazaña. A finales de julio tocarán allí seis días seguidos de nuevo.
Mambo Jambo es una de esas bandas que siempre están tocando. Por primera vez en 6 años hicieron un parón para grabar Jambology, su último disco. “Nos concentramos mucho en la composición, en los arreglos y hemos pulido el tipo de sonido que hemos estado trabajando estos años”, asegura Anton. Recuerda que además, por primera vez, no se produjeron ellos mismos su trabajo sino que contaron con Jairo Zavala (Depedro) a los mandos: “Necesitábamos un punto de vista con un poco de perspectiva y nos ha sacado mucho partido”, apunta Dani Nel·lo orgulloso del trabajo. Para él, gran coleccionista de discos, el objeto físico siempre será la mejor forma de presentar un trabajo cuidado.
Elisa Muñoz
Periodista en Cadena SER desde 2008. Primero en programas como 'La Ventana', 'Hoy por Hoy Madrid' o...