El Reino Unido construirá un muro en Calais para frenar a los refugiados

Londres

El gobierno británico construirá en Calais, en suelo francés, un gran muro para tratar de impedir que los más de 7.000 refugiados en el campamento de la Jungla (9.000 según los censos extraoficiales), entren en el Reino Unido a través del Canal de la Mancha. Hasta ahora eso es algo que non logrado vallas, cámaras de seguridad, excavadoras o las contundentes actuaciones de los antidisturbios.

El muro tendrá un kilómetro de largo y cuatro metros de altura. Se erigirá a ambos lados de la principal carretera y separará el campamento del puerto galo. "La Gran Muralla de Calais", como ya la apodan los medios de comunicación, será de un hormigón resbaladizo, que hará más difícil el que pueda ser escalada. Para suavizar el impacto visual de quienes circulen por allí estará camuflada con plantas y flores.

El secretario de Estado británico para la inmigración, Robert Goodwill ha confirmado que la construcción comenzará este mes. El muro debería estar concluido a finales de año. Su coste estimado es de más de 2 millones de euros. El dinero forma parte de un plan de seguridad acordado entre el Reino Unido y Francia y al que se ha dotado de un presupuesto de 21 millones.

Unos recursos desperdiciados dicen las organizaciones que trabajan con los refugiados, porque lo seguirán intentando, advierten. El muro será inútil y peligroso. Los camioneros opinan también que el dinero debería emplearse en incrementar la seguridad en las carretas adyacentes al puerto.

Lo que de verdad quieren los 70.000 habitantes de Calais, lo que llevan pidiendo hace mucho tiempo, es el desmantelamiento definitivo del campamento, algo que han prometido llevar a cabo el ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, previsiblemente antes de las elecciones presidenciales de abril el próximo año.