Aspas se gana el puesto

Madrid

Lo mejor del partido ante Inglaterra, en el que las pruebas en defensa nos dejaron con el culo al aire toda la primera parte, fue Iago Aspas. Llevamos mucho tiempo, desde Villa, sin que nos convenza de verdad la actuación de nuestros delanteros. Ni Diego Costa, ni Morata, ni Aduriz tienen el cartel de titular asegurado, por lo que estamos obligados a seguir probando. Y la prueba de Aspas ha salido notable.

El chaval, que ya no lo es porque tiene 29 años y ha madurado, salió a Wembley sabiendo que estaba ante una oportunidad única. Había sido llamado por la baja de Diego Costa, si esa recaída del delantero del Chelsea no llega a producirse quizás no hubiera ido nunca a la selección, tenía que aprovechar ese momento o podía no volver a tenerlo…

En el campo, con el partido cuesta arriba tras el segundo gol inglés, Aspas se rebeló. Sacó su doble genio, por una parte el de su carácter guerrero y caliente que le hace pelearse con los rivales, con los árbitros y si hace falta con sus compañeros, y por la otra el que tiene su fútbol, moviéndose con calidad en el ataque, pensando con rapidez en el área y fino en su relación con la pelota.

Antes de marcar ya había dejado muestras de que iba en serio y luego lo rubricó con el mejor que ha marcado un delantero de España en mucho tiempo. La carrera inteligente, la conducción mirando al defensa con la pelota pegada al pie, la decisión, la bicicleta, el amague y el toque a la escuadra con un efecto imposible hasta para la cámara de televisión. Un golazo.

Y luego la rabia en la celebración y el arrastre al colectivo para seguir buscando el empate, jugada en la que también participa porque saca al defensa de su sitio para que Isco aproveche ese hueco en el área.

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El chico se ha ganado el puesto y debe volver a la selección en las próximas convocatorias.