Dimite el director de comunicación de la Casa Blanca

Madrid

Apenas tres meses en el cargo y Mike Dubke ha salido del organigrama de altos cargos de la Casa Blanca tras presentar su dimisión como director de comunicaciones. Aunque la carta oficial había sido presentada al presidente Donald Trump el 18 de mayo, que la aceptó inmediatamente, se decidió que continuara en su puesto hasta que el mandatario regresara de su primer viaje internacional para propiciar una transición pacífica. En un email que publica este martes el portal Politico.com, Dubke cuenta a sus amigos que la razones de su partida son personales y califica de un gran honor haber servido al presidente Trump y a su gobierno. “También ha sido un placer trabajar diariamente con el personal de los departamentos de comunicaciones y prensa. Aquí están algunos de los hombres y mujeres más duros que trabajan para el gobierno de Estados Unidos", añade.

Dubke trabajaba mano a mano con el portavoz Sean Spicer, tratando de tapar huecos de las múltiples crisis informativas abiertas en la Administración, las más complicadas, las relacionadas con el llamado Rusiagate.

Pero Dubke no era la persona que Trump esperaba. De hecho le ha criticado públicamente junto a su propio portavoz Spicer, por considerar poco eficiente su trabajo, sobre todo, tras el despido del que fuera director del FBI.

Ahora, con rumores insistentes de la primera crisis de gobierno y de remodelación de algunos de los pesos pesados del ejecutivo, incluido el portavoz Spicer, Dubke abandona el barco. Había comenzado a trabajar en la Casa Blanca a mediados de febrero, pero tuvo un comienzo muy duro porque no formaba parte del equipo de campaña del presidente ni tampoco de su equipo de transición, aunque sí tenía experiencia como estratega política y era el fundador de Crossroad Media, una empresa dedicada a las comunicaciones y relaciones públicas del bando republicano.

Cuenta el diario The Washington Post a este respecto, que la Casa Blanca no anunciará de momento el nombre de su sustituto. Como reconoció el propio presidente en una entrevista a la agencia Reuters, pensaba que este trabajo iba a ser más fácil.