Más presupuesto para la Casa del Rey

Madrid

Tras varios años de rebajas y alguna congelación, la Casa del Rey recibirá para su sostenimiento 8 millones de euros, según consta en el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado de 2018 que presenta el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en el congreso de los diputados. Según se recoge en el artículo 65 de la Constitución, el rey recibe una "cantidad global para el sostenimiento de su familia y casa, y distribuye libremente la misma". Por tanto, es su competencia fijar los sueldos de cada miembro de la familia real así como la distribución del resto del dinero. Ahora falta por concretar el reparto de la partida económica, que probablemente se dará a conocer en los próximos días. El año pasado el sueldo del rey Felipe se estableció en casi 238.908 y el del rey emérito en 191.124 euros. La cantidad asignada a la reina Letizia fue de 131.400 euros mientras que la reina Sofía recibió 107.520 euros.

¿Cómo se gestiona el dinero?

Con la partida anual que recibe del gobierno, vía presupuestos, la Casa del Rey hace frente a sus obligaciones económicas: gastos de personal, gastos corrientes en bienes y servicios, suministros, protocolo, viajes y mantenimiento. Pero al margen de esta asignación hay otras actividades que implican a otros ministerios y que no contabilizan en esta partida: Presidencia, el que se encuentra Patrimonio Nacional, Defensa , ministerio que contabiliza los gastos de la Guardia Real, Exteriores, que gestiona viajes al extranjero, Interior del que depende el servicio de seguridad y Economía que gestiona el parque móvil, de los coches que tiene a su disposición la familia real.

Segunda subida tras la crisis

La primera fue el año pasado cuando el presupuesto de Felipe VI subió un 0,56% hasta los 7.82 millones de euros, que para 2018 contemplan un ligero incremento hasta llegar a los 8 millones de euros. No obstante, el presupuesto está lejos del periodo anterior a la crisis cuando en 2009 la partida económica rozó los 9 millones de euros. Un año después, en 2010, a petición propia, el rey Juan Carlos pidió que se congelara el presupuesto del año anterior. Después la partida se fue reduciendo, se congeló en 2015 y 2016, y finalmente estos dos últimos años ha subido ligeramente.