Otro festín de un Barcelona imbatible

El Barcelona se acerca al récord de liga invicto después de ganar al Villarreal en el Camp Nou (5-1). Los de Valverde consiguieron dejar los tres puntos en casa gracias a una muy buena parte y los goles de Coutinho, Paulinho, Messi y Dembélé (2). El Villarreal reaccionó en la segunda parte, pero fue demasiado tarde y no pudo remontar con el único gol de Sansone ante un magistral Barça. 

A falta de dos jornadas, el Barcelona se enfrentaba hoy el Villarreal en su camino por conseguir gran récord de la liga: una temporada sin conocer una sola derrota. Además, el Camp Nou presenciaba el penúltimo partido de Iniesta en casa después de la resaca de un Clásico que fue de todo menos descafeinado.

Como si fuera un mero trámite, el Barça empezó el partido comiéndose al Villarreal. El primer susto para los castellonenses vino de un disparo de Messi que se fue por arriba, pero poco después un tiro bajo de Dembélé se encontró con Asenjo, el portero perdió el rechace y Coutinho remató cruzado. Sin mucho esfuerzo, el Barcelona estrenó el marcador en el minuto 10.

Iniesta volvió a demostrar cuánto se le iba a echar de menos. Queriendo dejar los últimos buenos recuerdos en casa, el capitán encontró el hueco perfecto en el área pequeña para que Digne la mandase al segundo palo, donde espera Paulinho. Sin pestañear, el Barça llegó arriba, Iniesta la creó y Paulinho puso el segundo con un remate flojo -acabando con su sequía desde enero-.

Con el segundo gol y viendo la facilidad del Barça para encontrar portería, el Villarreal empezó a focalizar sus fuerzas en la defensa. La única ocasión de los de Javier Calleja hasta entonces fue un disparo de Pablo Fornals que encontró la mano de Cillessen.

Pero Messi e Iniesta se estaban despidiendo y no querían desaprovechar ni un segundo de sus últimos partidos juntos. Messi se adentró en el área, pero la zaga contraria se lo puso difícil y se la devolvió a Iniesta. El capitán, desde la frontal del área, volvió a hacer uno de sus pases y, como si fuese fácil, se la puso a Messi perfecta frente a Asenjo. El argentino la tocó picada y el guardameta no llegó. Así, justo antes del descanso, el dúo Messi-Iniesta puso el tercero.

En la segunda parte el Villarreal supo reaccionar ante un Barcelona muy superior. Un tiro de Bacca desde el área y otro disparo de Samu Castillejo desde la banda derecha desmostraron un Villarreal con mucha más autoridad. Luego, Bacca intentó un voleo que no le salió.

Cuando los castellonenses estaban llegando con mucha más frecuencia que en la primera parte, un tiro de Fornals desde el área chocó en la espalda de Sansone y entró en la portería de Cillesen -que pedía mano-. Tras varios intentos, encontraron portería. 

Con el gol, el Villarreal demostró haber despertado y tener ganas de ir a por el empate. Mucho más confiado y centrándose en atacar, volvió a tener la ocasión de oro para poner el empate. Un cabezazo de Rodri la puso, pero Cillessen sacó el balón fuera.

En el Barcelona, Valverde cambió a Iniesta por Luis Suárez y desde entonces, el ímpetu de los locales se desinfló con la marcha del capitán. Una de las ocasiones más destacables del Barcelona fue un gol anulado a Coutinho -tras una asistencia de Dembélé- por fuera de juego sobre el brasileño, más anecdótica en la segunda parte.

Lo que parecía un partido más que sentenciado al principio se le puso un poco cuesta arriba al Barcelona. Sansone disparó dos veces a puerta en cuestión de cinco minutos, pero el italo-alemán no encontraba la portería.

En los últimos minutos del partido, cuando el Barcelona ya se cansó de las amenazas a su portería, Rakitic puso lo que parecía el punto final. El suizo se metió hasta la cocina y librándose de hasta tres jugadores, desde la línea de fondo la puso al segundo palo y Dembelé apareció solo para rematar.

Y cuando parecía que todo el pescado estaba vendido, Dembélé marcó un golazo. Por si el Barcelona no había hecho suficiente, Dembélé hizo una jugada él solo en los últimos quince segundos que terminó con una vaselina que superó al portero y puso el 5-1. Así, el Barcelona se volvió a encontrar en los últimos minutos de un partido en el que volvió a demostrar por qué es imbatible en la Liga.