Descubren el origen del agujero del 'fin del mundo' de Siberia
Cuatro años después de ser descubierto, los investigadores dan con el origen de este misterioso cráter
Bilbao
En julio de 2014, un grupo de científicos descubría un insólito cráter en la península de Yamal, situada en el Ártico siberiano. Un ovalo, de unos 30 metros de diámetro y unos 70 metros de profundidad, que contaba con un lago helado en su parte inferior y agua cayendo sobre sus paredes erosionadas de permafrost. Tras este hallazgo, los investigadores comenzaron a investigar el origen del que sería conocido como agujero del 'fin del mundo'.
Cuatro años más tarde, un grupo de científicos rusos ha llegado a la conclusión de que el misterioso cráter fue resultado de una insólita actividad de criovulcanismo en la Tierra. A través de un estudio publicado en la revista de divulgación científica Scientific Reports, el equipo ha dado a conocer los detalles de un curioso fenómeno que, por norma general, se observa en otros planetas y satélites.
Así surgió el agujero del 'fin del mundo'
Durante el descubrimiento del cráter, los investigadores afirmaron que el agujero tuvo que formarse a partir de un "fenómeno natural". Ahora, el equipo determina que el cráter surgió a partir del colapso de un gran pingo (una pequeña colina) que se formó dentro de un lago que posteriormente se secó.
En primer lugar un talik grande (una capa de tierra no congelada durante todo el año que se encuentra en áreas de permafrost) se congeló bajo la superficie de la colina. A continuación, el talik permaneció sin congelar y almacenó una gran cantidad de dióxido de carbono disuelto en agua intersticial, alcanzando la saturación de la fase gaseosa, tal y como recoge el equipo dirigido por Sergey N. Buldovicz.
El colapso del pingo
Tras alcanzar esta fase, la sobrepresión resultante llegó a exceder el estrés de confinamiento de la litosfera y la fuerza del hielo superpuesto, provocando el colapsó del pingo bajo la presión hidrostática criogénica y desarrollando el criovolcán que ha desatado la curiosidad científica durante los últimos años. Cuando explotó la colina, el cráter siguió la forma cilíndrica del núcleo del talik remanente hasta mostrar la imagen actual.
Por lo tanto, tal y como han dado a conocer los investigadores de la Universidad Lomonosov de Moscú, el agujero del 'fin del mundo' no fue provocado por la caída de un meteorito ni del derretimiento del permafrost. Todo fue debido a un proceso anómalo (más frecuente en otros planetas y satélites) que permitió a este gran pingo convertirse en uno de los agujeros más sorprendentes de la Tierra.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...