De la Revolución Azul al Statu Quo, escenarios tras las elecciones en EEUU
Dos años después de las presidenciales que contra todo pronóstico colocaron a Donald Trump en la Casa Blanca, los estadounidenses vuelven a pasar por las urnas. Tienen que escoger a todos los miembros de la Cámara de Representantes, y a un tercio de los del Senado. El resto de la primera presidencia de Trump va a depender en gran medida de cómo queden configuradas esas dos instituciones, que actualmente controlan los republicanos.
Madrid
Los puestos en el Senado se renuevan cada seis años, y la casualidad ha hecho que en esta ocasión sólo nueve representantes republicanos se estén jugando su escaño. En el otro bando, en cambio, hay 26 demócratas, y diez de ellos se presentan en Estados en los que Trump ganó con claridad las presidenciales de 2016. Cualquier cambio en el Senado parece bastante complicado.
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En la Cámara de Representantes las cosas son diferentes. Se renueva por completo, y a los demócratas les bastaría una ganancia neta de 24 escaños para hacerse con el control. Además, 38 representantes republicanos no optan a la reelección en sus distritos, lo que tradicionalmente favorece un cambio de tendencia.
Estos son los tres posibles escenarios en la política estadounidense tras estas elecciones.
Escenario 1: La Revolución Azul
Los Demócratas recuperan el control de las dos cámaras. Éste sería el peor escenario para Donald Trump.
Legislación: la administración Trump tendría serias dificultades para sacar adelante cualquier iniciativa legislativa. Se podría pensar en un presidente más dispuesto a colaborar con los demócratas, pero con la reelección a la vuelta de la esquina, cuesta creer que Trump dijera sí a cualquier cosa que rechazaría su base electoral. El bloqueo político sería casi permanente.
Impeachment: ni en la mejor de sus previsiones los demócratas parecen conseguir los dos tercios del Senado necesarios para que prospere un juicio político para echar a Turmp de la Casa Blanca. Esa opción, además, colocaría al republicano ultra conservador Mike Pence en la Casa Blanca, lo que no parece del agrado de una buena parte del partido.
Previsión: casi imposible.
Escenario 2: un Congreso dividido.
Los Demócratas recuperan el control de la Cámara de Representantes, pero no consiguen el Senado.
Legislación: desde la cámara baja los demócratas podrían imponer algunas condiciones a la Administración a la hora de sacar adelante nuevas leyes, promover reformas en asuntos como la financiación de las campañas electorales, y sobre todo podrían potenciar las comisiones de investigación sobre algunos de los escándalos que rodean a Trump.
Tras lo vivido estos dos años, y sin el fallecido McCain, no parece probable la aparición de senadores díscolos en las filas republicanas pese a las diferencias existentes con Trump en algunos asuntos.
Impeachment: con los republicanos controlando el Senado, hay que dar por descartada esta posibilidad.
Previsión: el más probable.
Escenario 3: Statu Quo
Nada cambia respecto a la situación actual, los Republicanos mantienen el control de las dos cámaras.
Legislación: Trump podría retomar su principal asignatura pendiente, la abolición del Obamacare, de la que hizo un asunto casi personal en la recta final de la campaña de 2016. También se agilizaría cualquier nombramiento en el Supremo, en el caso de nuevas bajas, lo que podría darle un perfil conservador al Tribunal para un largo periodo de tiempo con independencia de los resultados de futuras elecciones. Algo similar podría decirse de la elección de un nuevo fiscal general si como algunos apuntan Jeff Sessions no llega a concluir su mandato. Sería un éxito rotundo para Donald Trump, que afrontaría con total tranquilidad los dos años que le quedan en la Casa Blanca y saldría lanzado hacia un segundo mandato.
Impeachment: ni se plantea.
Previsión: poco probable
Rafa Panadero
Ha desarrollado casi toda su carrera profesional en la Cadena SER, a la que se incorporó en 2002 tras...