Sociedad

"Vendrán decenas de millones de africanos a Europa, no es una exageración y no se puede refutar"

Stephen Smith, periodista, escritor y académico experto en África augura en "La huida hacia Europa. La Joven África en marcha hacia el Viejo Continente", una convergencia demográfica de grandes dimensiones entre Europa y África

El ensayo, Premio Libro de Geopolítica 2018 en Francia, y que ha sido usado por los partidos xenófobos para alarmar sobre esa posible llegada de migrantes, algo que rechaza el autor, es un compendio de previsiones estadísticas que parten de la idea de un gran desarrollo económico del continente africano

"Se producirá una migración en masa que supondrá uno de los grandes desafíos del siglo XXI" prevé Smith que confía en que se consolidará un modelo de convivencia

Stephen Smith / Instituto Francés Instituto Francés

Madrid

La principal tesis de su libro, plagado de estadísticas y previsiones es que Europa va a asistir quiera o no a la llegada de millones de africanos en muy poco tiempo. Parte usted de una comparación arriesgada, traslada una proyección de lo que sucedió entre México y EEUU a toda África y toda Europa. Decir que vendrán 150 millones de africanos a Europa ¿no es alarmista? .De hecho grupos racistas de Francia han usado sus previsiones para hablar de “invasión” y otros típicos términos creadores de racismo. Explíquenos, ¿Cómo cree que se puede producir este gran cambio de la población de ambos continentes en menos de 30 años?

La primera condición, la condición sine qua non, es que África salga de la pobreza absoluta, algo que en mi opinión tendrá lugar en 10 ,15 o 20 años próximos. Pero no se puedo hablar de un dato muy concreto, se tratará de decenas de millones de personas seguro. Yo he tomado un paralelismo histórico, un precedente reciente que es la emigración mexicana de 1960 y 2014, 12 millones de mexicanos salieron hacia EEUU. Desde entonces los flujos se han parado en contra de lo que dice Trump, por supuesto, y el desarrollo en México es tal que la realidad es que la mayoría de los mexicanos ahora prefiere quedarse en su país y ya no migran. He aplicado el modelo mexicano a los africanos y si los africanos se ponen a emigrar como lo hicieron los mexicanos, se van a mover con estos emigrantes y sus hijos unos 150 millones al final de esta transición demográfica desde África a Europa. Hoy en día en EEUU el 10 por ciento de la población extranjera son mexicanos, se ha pasado de 12 millones a en la actualidad 30 millones. Pero es una hipótesis y muchas diferencias con la frontera de México con EEUU, hay una frontera terrestre, no está el Mediterráneo, no se puede comparar de la misma manera, pero es cierto que la población de América Latina, unos 600 millones de habitantes, y en EEUU hay 350 millones de habitantes, es decir hay un resultado de 2 por cada 1. En África hoy hay 1300 millones de habitantes y en 30 años no hay duda habrá en torno a 2.400 millones, entonces la relación frente a Europa será de 5 africanos, de los que 3 tendrán menos de 15 años, por un europeo, seguiremos siendo 500 millones en Europa, que tendrá 51 años de media. Se ve la presión migratoria sobre Europa, todo lo que se conoció incluso en 2015 no tiene nada que ver con lo que vendrá. Será en 10, 15 o 20 años, nadie puede dar una cifra exacta, no quiero hacer una profecía, no queremos jugar con las cifras, que se pueden usar políticamente. Por tanto, los flujos van a comenzar cuando África salga dela pobreza absoluta, no es el caso de momento, pero será muy importante, serán decenas de millones de emigrantes, no es una exageración, y no se puede refutar. Observo que Europa, en cuanto a la toma de conciencia, no hablo ya de la clase política, no está en absoluta preparada para este desafío, y hablo de desafío y no de problema porque vivimos en una relación de vecindad con el otro.

Ahora mismo en todo el continente europeo viven menos de 10 millones de africanos y usted dibuja un cambio total en el perfil de la población del viejo continente. ¿Está preparada Europa para un cambio de modelo poblacional así, se está haciendo algo a la espera de esa llegada de personas?

No, desgraciadamente estoy a la vez decepcionado y soy crítico con Europa y África. Europa ha olvidado su propia historia, ha olvidado su propia emigración y hoy trata a los migrantes como gente que viene de otro planeta, cuando nuestros abuelos han emigrado casi todos como mi propia familia. Hemos olvidado que 60 millones de europeos partieron a la emigración sin que nadie lo pidiera en el exterior, así que es habitual tratar la cuestión de las migraciones o los refugiados muy a menudo pero prepararnos para esa evolución demográfica que viene nada, cero. 

En el libro usted describe varios escenarios posibles en el caso de que lleguen esas decenas de millones de africanos a Europa, pero ¿Cómo será esa vecindad?

He intentado analizar esa vecindad entre Europa y África en el futuro y se puede concluir que finalmente habrá una convergencia migratoria. Como resumen diré que hay varios escenarios, unos verán esa convergencia como conflictiva y otros como deseable, pero hay una apariencia clara que quiero compartir para el futuro y es que va a depender de la manera que se afronte esa convergencia y será preferible que sea una vecindad más sana de la que existe en la actualidad. La idea es abrir un debate sobre esa convergencia entre los dos continentes, que en el pasado ha sido desgraciada, sabemos la opinión sobre el colonialismo, no se puede hacer apología de ello, así que espero que la vecindad que se cree en el futuro sea más feliz.

Pero explique como será esa llegada de tantas personas a Europa. ¿Vendrán aun en parte por vías irregulares? ¿Será una necesidad para cubrir el mercado laboral europeo, se crearán de verdad vías de entrada segura porque los necesitamos?

Constato que la cuestión de la necesidad económica de la migración laboral es muy controvertida. No estoy seguro del contenido de la evolución del mercado laboral, pero no estoy en mi especialidad. No sé cómo evolucionará, pero para mí, la migración futura es mucho más una migración elegida, pero no en el sentido que lo usó Sarkozy, sino elegida por la gente, en términos elegidos por las personas y sin una restricción demográfica y económica, y creo que muchas personas lo cuestionan: las fronteras nacionales, la desigualdad global relacionada con el pasaporte que me permite viajar a mí por ejemplo en 120 países mientras los somalíes no pueden viajar dela misma manera. La cuestión tiene que ser debatida, creo que cambiaremos eso, pero las realidades de la desigualdad pesan mucho en el futuro. En este debate, en la actualidad, me parece que en Europa, tengo la impresión de que hay una regresión nacionalista, especialmente en Europa del Este, se grita o se dice por ejemplo que se quiere un estado húngaro étnicamente puro, sigue siendo bastante inquietante. Por lo tanto, creo al menos tomará mucho tiempo, veo en realidad dos corrientes contradictorias funcionando. Una que es una regresión y otra que es una progresión y espero que esto no conduzca a un choque, habrá un ganador y elegí mi lado.

La realidad es que cuesta imaginar ese escenario dada la cantidad de muertes en el Mediterráneo ante la apatía o la impunidad de los Estados y de buena parte de la sociedad europea….

El Mediterráneo puede volver a ser este vínculo entre los dos continentes, aunque hoy es más bien la escena dramática de personas que intentan realizar un sueño de vida y que a menudo se lo impiden o que se entregan a una infraestructura criminal completa, la de los traficantes. Por eso creo que es responsabilidad de las autoridades políticas de los 2 continentes encontrar una mejor manera de vivir esta convergencia.

Habla usted de manera casi unitaria desde una posición euro centrista, ¿y África? ¿Las revoluciones sociales que están echando del poder a sátrapas y cambiando el futuro de muchos países no cambian sus previsiones? Con un futuro en construcción con mejores perspectivas cuesta creer que tantos africanos vayan a venir a Europa como usted dice.

También estoy criticando la decepción de África, que no tuvo en cuenta los datos demográficos para pensar en una planificación familiar, no coercitiva, sino en una planificación familiar basada en el voluntariado que, en mi opinión, facilitaría su desarrollo económico y también creo que los gobiernos africanos ven en esta emigración solo una renta migratoria que se puede obtener de Europa en lugar de ver la sustancia humana o el material humano que puede permitir el surgimiento de un “Euráfrica” o un África-Europa depende.

Usted en el libro habla de un modelo migratorio español basado en una política de “un poco de todo”, ¿a qué se refiere? ¿Es España es diferente ahora mismo frente a la corriente europea basada en medidas policiales o de control de entrada?

Realmente tengo que admitir mi ignorancia en los detalles, no quiero simplemente decir que sí. Tengo la impresión de que, en cualquier caso, España es más reactiva, es decir, puede que no esté preparada pero tengo la impresión de que también se improvisa, pero se improvisa diciendo que podemos llegar hasta allí y daremos los medios para responder. Por ejemplo, a un barco que está en el Mediterráneo no necesariamente porque estábamos preparados pero se responde mientras que en otros lugares veo cierto cinismo. En ellos se dice que si tenemos que acoger 500 o 50 personas se creará un precedente, un supuesto efecto llamada y nos atraerá más migrantes. Creo que España tiene un razonamiento por el momento más pragmático para, una vez más, reaccionar políticamente bien, pero también sabe que no es realista decir que todos pueden venir y que las fronteras no existen más. Pero sí, soy aun un poco optimista.

Pero a España también ha llegado la ola racista y xenófoba que campa por toda Europa y algunos creen que va a ser un elemento a tener en cuenta en las próximas elecciones

Escribí este libro antes de que Vox apareciera en la escena política y no creo que vaya a cambiar de curso, y hay que tomárselo en serio, especialmente cuando observamos la regresión en torno al Mediterráneo, así que no voy a minimizar el hecho, pero debo decir que quizás también esté en desacuerdo con algunos que piensan que es un mosaico de la política. Tengo la impresión de que a menudo se pregunta cuál es la solución y estoy convencido de que no existe, ni hay un gran diseño o dibujo, no hay una solución única. Creo que se debe ser pragmático, es decir que hay una transición demográfica para los próximos 40 años y en un siglo aparecerá en la historia que no será una tragedia. Para pasar los próximos 40 años se tiene que hacer un poco de todo, se tiene que asegurar las fronteras y se tienen que respetar, de lo contrario, me parece difícil pero también abrir las fronteras para la acogida. Así descubrí que había un modelo español que es un modelo muy modesto, que no es muy atractivo, pero que ladrillo a ladrillo se desarrolla, ha pasado el curso humano. Por supuesto, veo que hay cosas que me conmueven, los excesos de seguridad etc (en Ceuta y Melilla) pero cuando lo comparo con otros países sumando la voluntad de hacerlo mejor en la integración, espero que la segunda generación se sienta realmente mejor, hay un cambio con el panorama del norte de Europa. También la relación que se crea con Marruecos, no solo, también con Mauritania y Senegal, a la manera española, de ser pragmática para hablar entre unos y otros, de manera más igualitaria que los antiguos poderes coloniales que regresan a África realmente ha hecho un modelo que me atrajo. Pensé que era un modelo en el que las personas, tal vez también debido a la historia migratoria reciente de los españoles, que recuerdan sus propias experiencias , que queda en su cabeza , tratan a los migrantes, generalizo un poco, un poco mejor que el resto de Europa. Creo que se puede construir una suerte de laboratorio migratorio en España. Soy muy optimista, y tal vez la confrontación también con las ideas de Vox, que no solo es parte de la migración, sino mucho de la soberanía o de la unidad española, creo que no debemos equivocarnos. Aquí encontré un modelo español mucho más abierto que en otros países, aquí hay un verdadero intercambio. Espero que mi modelo español sobreviva.

 
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