Duras críticas internas a la política arancelaria de Trump contra México

Washington

La decisión del presidente Donald Trump de incrementar de manera gradual los aranceles a México contó con la oposición de dos de los más influyentes miembros de su Administración en asuntos económicos.

Según fuentes de la Casa Blanca citadas por la televisión CNBC, tanto el secretario del Tesoro, Steven Terner Mnuchin, como el de Comercio, Wilbur Ross, han monstrado su oposición a la subida de aranceles a todos los productos mexicanos.

Una opinión generalizada entre los funcionarios de la Casa Blanca, pero también entre congresistas y senadores, tanto demócratas como republicanos, que no quieren vincular la política migratoria con la comercial porque consideran que la imposición de aranceles va a tener un impacto directo e inmediato, tanto en la industria como en los consumidores estadounidenses.

La Casa Blanca detalló en un comunicado que los gravámenes entrarán en vigor el próximo 10 de junio y serán inicialmente del 5 %, pero matizando que "si la crisis [en la frontera] persiste", subirán al 10 % el 1 de julio, al 15 % el 1 de agosto, al 20 % el 1 de septiembre y al 25 % el 1 de octubre.

México exportó en 2018 a Estados Unidos 346.500 millones de dólares en productos que se verán afectados por esta imposición arancelaria, desde frutas y verduras a vehículos y tecnología. La Casa Blanca aprovechó la ocasión para invitar a las empresas estadounidenses que producen en México a que se "reubiquen" en EE.UU. para no pagar los aranceles ni verse afectadas por la medida.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se ha mostrado confiado en que EE.UU rectificará y ha agradecido el apoyo del magnate Carlos Slim. Pero el su vicecanciller, Jesús Seade, ha asegurado que México no se quedará "con los brazos cruzados" ante la imposición arancelaria de Trump.