Un sector de Ciudadanos se planta ante la política de pactos de Albert Rivera

El hiperliderazgo de Albert Rivera sobre el que se ha construido Ciudadanos no ha dado pie nunca a disensos como el que se va a vivir este lunes en la ejecutiva nacional del partido. Y además a cuenta de algo nuclear, que es la política de pactos.

Rivera tendrá que escuchar los planteamientos de un sector encabezado por Luis Garicano, eurodiputado electo de Cs, el hombre fuerte de la economía en el partido. Garicano y con él otros miembros de la ejecutiva explicarán que no quieren plegarse por sistema al PP, que tampoco quieren compartir gobiernos con Vox y además, a diferencia de la posición oficial de Ciudadanos, que sí apoyan la vía de Manuel Valls: el pragmatismo de hacer alcaldesa de Barcelona a Ada Colau para evitar que los independentistas gobiernen la segunda ciudad de España.

En declaraciones a la Cadena SER, Garicano asegura que “el objetivo es siempre para Ciudadanos hacer lo correcto para España”. Por eso propondrá en la reunión de esta mañana “evitar que los separatistas, nacionalistas o extremistas tengan control de ninguna institución y con ese objetivo vamos a buscar esos pactos”.

Dicho de otra forma, que el partido tiene que pactar con el PSOE (como se está haciendo en Europa) y también con las opciones “menos malas”, asegura Graciano, como es el caso de Colau en Barcelona, un plan que Rivera ya ha censurado por considerarla “populista”.

Así que este sector dará esta mañana ‘la batalla’ aunque Garicano prefiere decir que lo que hay es “debate”: “Ciudadanos no es un partido de ordeno y mando, sino que somos un partido en el que nos escuchamos, debatimos y tomamos la decisión que consideramos”.

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En todo caso, para Garicano “la decisión de hoy es muy importante” porque es ver “como vamos a llevar a cabo la política de pactos”.

Además, habrá que ver si en ese debate emerge también el profundo malestar que ha causado la decisión de la cúpula del partido de asumir, de no preocuparle hacerse la foto con la ultraderecha de Vox aunque no se negocie nada.