8,5 millones de personas sufren exclusión social en España

Madrid

En medio de los debates sobre estrategias y los movimientos para conseguir el poder en todos los ámbitos de la vida política aparece la realidad social y los problemas de millones de personas. Este miércoles hemos conocido los datos del último informe de Cáritas, la ONG de la Iglesia católica, elaborado a partir de 11.600 encuestas realizadas en todas las comunidades y con la participación de 130 investigadores de una treintena de de universidades. Se publica cada cinco años y, según los expertos, es uno de los más fiables de los que se difunden en nuestro país. 

Este informe señala que 8,5 millones de personas (el 18,4% de la población española) sufren exclusión social. Esto significa que hay 1,2 millones de personas más en esta situación que antes de la crisis. De los 8,5 millones, casi la mitad (4,1) están en situación de exclusión social severa por inseguridad de vivienda, desempleo persistente o precariedad laboral extrema.

En cuanto a la vivienda, un total de 2,1 millones de personas viven con la incertidumbre de quedarse sin vivienda, lo que supone un 4% de los hogares.  Así se desprende del VIII Informe de la Fundación Fomento de Estudios Sociales y Desarrollo Social en España (Foessa) sobre exclusión y desarrollo social en España, presentado este miércoles. El informe subraya la necesidad de una "intervención urgente" sobre el grupo de los "expulsados", que dentro de esos excluidos suman 1,8 millones de personas (el triple que en 2007).

Los datos de Foessa subrayan también que a esas penalidades pueden llegar otras muchas personas, pues dentro de la sociedad integrada hay una bolsa de ciudadanos que en el documento llaman la "sociedad insegura". Serían unos seis millones de personas, una ciudadanía "en el filo de la navaja" y en "la antesala de la exclusión" para la que el ascensor social ha dejado de funcionar.

El sociólogo Guillermo Fernández, coordinador del informe de Foessa, ha detallado en Hora 14 que esa "antesala de la exclusión" es ese estado en el que la precariedad es tal que, pese a una apariencia de vida normalizada, cualquier imprevisto económico o en materia de salud, trabajo, vivienda o apoyo social puede acabar llevándoles a una situación de exclusión. "Son personas que viven al día y se enfrentan a esa situación cotidianamente", ha explicado.

Según el sociólogo, "tenemos un grave problema en este país" cuando para muchas personas resulta imposible construir un proyecto vital de futuro y centran todos sus esfuerzos en la superviviencia. "Eso afecta a los hijos que les gustaría tener o a la educación complementaria que quisieran realizar", ha dicho.

El informe también ha puesto de manifiesto que parte de la sociedad está mostrando "fatiga de solidaridad". Un concepto que Fernández no relaciona con el colchón familiar ("sigue existiendo porque la familia española se entrega a tope, aunque llega un momento en el que desaparece"). La novedad, según el sociólogo, es que ya "no solo es un tema de recursos" sino que "hay un tema de voluntad".