Una persona defeca en una piscina de Valencia y obliga a cerrarla durante un día
Ha ocurrido en Catarroja, Valencia, y el Ayuntamiento ha tenido que aplicar el protocolo de sanidad para que vuelva a estar disponible para los usuarios
Madrid
La piscina municipal de Catarroja, en Valencia, tuvo que cerrar debido a la presencia de excrementos en ella, según ha podido saber el diario 'Las Provincias'. Inmediatamente el Ayuntamiento aplicó el protocolo de sanidad para que volviera a estar disponible para los usuarios, pero permaneció un día cerrada.
Las actuaciones de higiene pasan por vaciar la piscina de agua y volver a llenarla, además de ajustar de nuevo el cloro, según informó el ayuntamiento de este municipio al medio citado. El alcalde de Catarroja, Jesús Monzó, en declaraciones a 'Las Provincias', aseguró que "no se ha localizado al culpable de esta situación" y entiende que se trata de un acto de gamberrismo porque "si hubiera sido un niño los responsables lo hubieran comunicado.
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Un asunto sanitario
El alcalde afirma que todos los días realizan "controles rigurosos" y, además, ha hecho un llamamiento a la ciudadanía a que este tipo de actos "no vuelvan a producirse". Sobre todo porque supone privar a la población de un bien público como es la piscina municipal, especialmente en verano.
Después de aplicar el protocolo sanitario, que se espera termine en los próximos días, el jefe del consistorio de Catarroja ha llamado al "civismo". No es la primera vez que las piscinas de Valencia sufren este molesto problema. Según 'Las Provincias' en la localidad de Massanasa encontraron, de nuevo, heces en el agua. En este caso el alcalde tomó la decisión de reducir el aforo de la piscina, de 1.100 a 700, aunque al día acudían unas 300-400 personas.