Sánchez pretende movilizar a la izquierda descontenta agitando el miedo a la extrema derecha
El candidato del PSOE ha asegurado que a la ultraderecha se la vence "aislándola" y defendiendo los valores democráticos
Mislata
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha asegurado, en la segunda jornada electoral, que a la ultraderecha se la vence "aislándola" y defendiendo los valores democráticos, y ha advertido de que Vox anda "con el pecho henchido" porque ha unido su destino "a la derecha". En un acto en Mislata (Valencia), Sánchez ha querido trasladar esta "reflexión" para dejar claro que la única forma de vencer a la ultraderecha es "condenando el franquismo, el machismo, la xenofobia y su banalización de la violencia de género".
"Todos contra el PSOE y el PSOE contra el bloqueo de todos, de eso va esta campaña" ha dicho el candidato socialista, que ha visto esta estrategia en el primer debate televisado de la campaña, el celebrado ayer entre los siete portavoces parlamentarios. En el pabellón El Qint yante 2.000 asistentes, Sánchez ha insistido en que la derecha y la ultraderecha quieren "frenar" al PSOE para que haya un gobierno débil, pero también en esa tesitura andan los independentistas y la "pretendida izquierda" y esa actitud general, ha remarcado, se vio ayer en el debate.
El candidato socialista ha ofrecido el PSOE como el único voto útil y ha dado una "mala noticia" a la derecha, "empeñada en una campaña de desmovilizar a la izquierda". A ella le ha dicho que "la España progresista, va a votar el 10N y va votar al PSOE". Pero también ha dado una "buena noticia para España" que gracias a ese "voto masivo" podrá ponerse en marcha para avanzar en justicia social, convivencia y limpieza. "Habrá un gobierno progresista liderado por el PSOE", ha dicho Sánchez que ha prometido aprobar los Presupuestos Generales del Estado en el primer trimestre del año, cumplir con el Estatuto de autonomía de la Comunidad Valenciana, aprobar una nueva ley educativa, otra de Formación Profesional, de universidades y de lucha contra el cambio climático.
Ha mostrado su perplejidad porque a la derecha le molesten los triunfos de España como el hecho de que Madrid albergue la Cumbre de cambio climático, entre el 2 y el 13 de diciembre.
Sánchez ha admitido que le consta que hay "gente cansada" porque ya se votó el 28 de abril y el 26 de mayo, "que tenga dudas de qué hacer, a quien votar e incluso que se cuestionen el valor de su voto".
El candidato socialista ha dicho "empatizar" con ese "hartazgo" pero, ha subrayado, que la única forma de "romper el muro del bloqueo es dejar sin argumentos a aquellos que construyeron ese muro". "Habrá muchas siglas y muchas papeletas el 10N, por cierto, más que nunca; pero sólo una papeleta romperá ese bloqueo y ese voto es el Partido Socialista, y por eso nos tenemos que movilizar", ha añadido. Sánchez ha insistido en la movilización y ha concluido sus discurso recordando que fue este Gobierno en funciones el que exhumó los restos del dictador, comenzando así a saldar la deuda contra las víctimas del franquismo.
Sánchez también ha pedido que no se dé por hecho que las encuestas van a implicar la victoria y ha acusado a la oposición de instalarse "en el insulto, la descalificación y la mentira" y así se puede ver, ha dicho, "en los vídeos de los debates de esta legislatura 'non nata'".
El cabeza de lista por Valencia y ministro en funciones, José Luis Ábalos, ha afirmado que la única elección el 10N es "un gobierno socialista o un gobierno del PP con los franquistas". En su intervención, Ábalos ha insistido en que la alternativa al PSOE es un gobierno liderado por Pablo Casado y con Santiago Abascal de vicepresidente, y sobre Ciudadanos "el único enigma es saber su nivel de derrota". En el acto, Sánchez ha estado arropado por el presidente de la Generalitat Valenciana y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig; y el ministro en funciones y cabeza de lista por Valencia, José Luis Ábalos.