Exteriores cierra la ventanilla consular en el Sáhara Occidental
Los 12.000 saharauis con nacionalidad española tendrán que desplazarse más de mil kilómetros a Rabat para cualquier gestión administrativa
Rabat
En pleno ahogamiento de Marruecos en los pasos fronterizos de Ceuta y Melilla y con las dos leyes nuevas de demarcación territoriales aprobadas en el Parlamento marroquí que afectan a las Islas Canarias, la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos (ASADEDH) denuncia desde El Aaiún a la Cadena SER el cierre de los trámites consulares en El Aaiún, capital del Sáhara Occidental, lo que afecta a 12.000 saharauis con nacionalidad española, entre ellos 7.000 menores.
El día 13 de febrero la cónsul de España de Rabat, Celsa Nuño García, emitió una orden dando instrucciones de que “no se tramitará ningún tipo de autorización y concordancia de nombre en esta depositaria”, en la Casa de España de El Aaiún.
Desde hace más de cuatro décadas en esta oficina, ubicada en un antiguo edificio del ejército español, se autorizaba al depositario a emitir certificados administrativos a los saharauis con nacionalidad española y a sus descendientes.
Hasta este mes el depositario español del ministerio de Exteriores Manuel Carretero tenía la potestad para firmar algunos documentos de segunda categoría, como la autorización a un cónyuge para viajar a España con hijos menores, la concordancia de datos o la verificación de una traducción. A partir de ahora para cualquier trámite hay que viajar a Rabat, a 1.165 kilómetros. El funcionario español aseguró a las asociaciones saharauis el lunes y el martes “no tener conocimiento de los motivos del cierre”.
La decisión llega tras los viajes a Rabat de los ministros españoles de Exteriores, Arancha González Laya, y del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Según el periódico marroquí en francés Yabiladi.com, la decisión se tomó en la reunión celebrada el 24 de enero en Rabat, en la residencia del embajador Ricardo Díez-Hochleitner Rodríguez, entre la ministra de Exteriores, González Laya, y los cónsules españoles destinados en Marruecos. Y asegura que “la opción de devolver la oficina a El Aaiún parece difícil en el contexto actual”.
Además este medio publica que algunos lo ven como una manifestación más del “abandono” de España de sus “responsabilidades históricas con el pueblo del Sáhara Occidental” y del “reconocimiento de la soberanía marroquí” sobre el territorio. El edificio era el archivo de documentos de la población local durante la era colonial, en particular los resultados del censo de 1974, considerado por el Frente Polisario base para la organización de un referéndum de autodeterminación en el Sáhara Occidental.
Ante este cierre imprevisto, la ASADEDH solicitó el lunes al depositario español Manuel Carretero “que se abra una antena en Tarfaya para evitar tener que movilizar a los saharauis con nacionalidad española desde El Aaiún a Rabat para trámites menores”, explica telefónicamente su presidente, Ramdan Larbi.
Precisamente, en los últimos meses, el gobierno marroquí ha abierto cinco consulados de países africanos en El Aaiún y tienen previsto inaugurar dos más; incluso la prensa nacional publicó que pronto España tendrá una sede en la que las Naciones Unidas considera capital del Sáhara Occidental.