La Real Sociedad finaliza el sueño del Mirandés y vuelve a una final 32 años después
Un gol de penalti de Oyarzabal dio la victoria en Anduva a los de Alguacil (0-1)
La Real vuelve a disputar una final de Copa del Rey 32 años después
La Real Sociedad es la primera finalista de la Copa del Rey tras eliminar al CD Mirandés. Un gol de Oyarzabal de penalti dio la victoria a los txuri urdin en el partido de vuelta y sentenció la eliminatoria para los rojillos, que finalizan así su sueño copero (1-3).
Anduva recibía a la Real Sociedad marcando su historia al llegar por segunda vez a la semifinal y confiando en el milagro. Los de Andoni Iraola tenían que remontar un 2-1 cosechado en Anoeta, y para ello salió con el once de gala -liderados por Merquelanz y Matheus-. En el campo contrario, Imanol Alguacil confió en Oyarzabal, Willian José y Januzaj para el ataque.
En los primeros minutos de partido, ambos equipos comenzaron con sensaciones parecidas: creando pocos espacios y divididos con una posesión del 53% para los txuri-urdin. Las primeras paradas del partido las protagonizó Limones, que bloqueó los tiros de Willian José y un remate a bocajarro de Janujaz.
Para los rojillos, las ocasión más claras fue un tiro de de Sergio González, que finalmente fue anulada por fuera de juego. Ambos conjuntos vieron una amarilla: una para Montreal por una entrada sobre Limones y otra para González por otra sobre Oyarzabal.
La jugada que determinaría la primera parte resultó ser una mano. En un ataque txuri-urdin, un centro de Zaldua encontró la mano de Malsa dentro del área. Sánchez Martínez lo tuvo claro: pitó penalti y el capitán de los vascos fue el encargado de tirar la pena máxima. Oyarzabal, con nervios fríos como el hielo, no erró desde los once metros y abrió el marcador en el 40’.
Tras el pase por vestuarios, la Real reanudó el partido dándole un susto al Mirandés: Januzaj encontró el larguero rojillo, tras un milimétrico desvío de Limones. Pero los los locales respondieron con un remate de Guridi que Elustondo desvió in extremis.
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Para renovar fuerzas, Imanol decidió sacar a Willian José para meter a Isak. Iraola sustituyó a González, amonestado, por Carlos Julio. Un remate de cabeza de Matheus al segundo palo supuso el mayor susto de la segunda parte.
La Real, replegada atrás con el cómodo 1-0, aprovechaba las contras y le ganaba la espalda a los rojillos. Limones volvió a salvar a los locales cuando repelió con los puños una falta colgada de Odegaard.
En los últimos minutos, los rojillos buscaban la salvación de los dos goles para conseguir la prórroga que podría darles la oportunidad de oro. La Real estaba sólida atrás y un buen Remiro repelía todas las oportunidades del Mirandés. Isak supo aprovechar una contra y encontró al red de Limones, pero la jugada quedó invalidada por fuera de juego.
Así, cuando llegó el 92' el MIrandés despertó del sueño y la andadura copera llegó a su fin. La Real Sociedad cerró el pase a la final sin conocer la derrota y 32 años después, los txuri urdin volvían a una final -y se aseguraba su plaza en la Supercopa-, todavía esperando de su rival: el Granada o el Athletic.
