Qué es Mercurio Retrógrado y por qué tanta gente le achaca sus males
"Es como si hubiera un impedimento constante. Algo que ensucia las gestiones y que lo enturbia todo"
Madrid
En España, ahora mismo, hay dos tipos de personas: las que llevan 20 días atribuyendo a una misma causa sus pequeños fracasos cotidianos, malos entendidos y errores informáticos, y las que no tienen ni idea de qué es Mercurio Retrógrado. Pero basta con darse una vuelta por Twitter o por Google Trends para constatar que el interés por el asunto no deja de crecer.
Según las creencias de la astrología clásica, Mercurio Retrógrado es un periodo de tres semanas que se repite cada tres meses y que se asocia a los problemas en la comunicación. El primero de 2020 termina hoy lunes (9 de marzo) y los siguientes llegarán del 18 de junio al 12 de julio y del 13 de octubre al 3 de noviembre.
"Se supone que es un momento planetario anómalo en el que las comunicaciones no fluyen y en el que, si tratas de negociar cosas relevantes, no se te dan bien", cuenta María (nombre falso). "Es como si hubiera un impedimento constante. Algo que ensucia las gestiones y que enturbia todo lo que haces. Si tienes que firmar una hipoteca, por ejemplo, te recomiendan que esperes a que se acabe".
María tiene formación universitaria, ostenta un cargo de responsabilidad en una empresa del sector del marketing y se declara agnóstica. Confiesa, sin embargo, que es "un poco supersticiosa" y, aunque no se toma todo al pie de la letra, sigue las publicaciones de Cáncer Horóscopo Negro en Instagram. No es la única: cada una de sus 12 cuentas (una por cada signo del zodiaco) ronda el millón de followers y la genérica, sumando Facebook, Twitter e Instagram, supera los 13.
- DEFINICIONES (RAE)
Gracias a sus publicaciones, plagadas de expresiones coloquiales, Horoscopo Negro ha conseguido reenganchar a la astrología a una nueva generación de españoles —hispanohablantes, en realidad— que ya no se sentían interpelados por la estética tarotista noventera y por frases del tipo "queridísimo piscis".
María, por ejemplo, comparte esa afición con tres compañeras del trabajo. "Es como un placer culpable", asegura. "A los que nos llama la atención, lo consumimos, pero no lo contamos porque parece un poco trasnochado".
El tema estrella de las últimas semanas ha sido Mercurio Retrógrado, sin duda. María, por ejemplo, asegura que no se lo toma tan en serio como para llegar a sentirse condicionada, pero sí reconoce que, cuando le pasa algo, lo achaca a la supuesta influencia del movimiento del planeta más cercano al sol.
"Intenté hacerme un tatuaje, pero la conversación con el tatuador la tuve en pleno Mercurio Retrógrado y, a la hora de hacérmelo, él había entendido una cosa distinta... y no me lo hice", explica. "También hacemos bromas. Decimos: '¡Ay, Dios mío, la que nos espera! Pero lo decimos y ya está. Seguimos con lo nuestro".
Lo que dice la ciencia
"Mercurio Retrógrado no existe". Así de tajante se muestra Enric Marco, investigador del departamento de Astronomía y Astrofísica de la Universidad de Valencia. Su explicación es fácil de entender, además, pero requiere un par de apuntes previos.
Si nos pusiéramos en el Sol, veríamos que todos los planetas giran en el sentido contrario a las agujas del reloj. Pero el "movimiento aparente" de los planetas , visto desde la Tierra —el tercero más cercano al Sol—, varía en función de si están dentro o fuera de la órbita que la Tierra sigue alrededor del Sol. Los que están más lejos parece que se mueven más lento.
La Tierra tarda un año en dar la vuelta al sol. Marte, en cambio, tarda casi dos, así que hay un momento en el que la Tierra adelanta a Marte y, a partir de ese momento, durante 15 días, parece que Marte vaya hacia atrás. Ese "bucle" es el movimiento retrógrado de Marte y recuerda al de dos coches que van por la autopista, circulando cada uno por un carril: "Te vas acercando, llega un momento en el que te pones a su altura... y al final parece que el otro va hacia atrás".
Pero eso solo se produce en los planetas más lejanos al Sol. "El año de Venus dura 230 días y el de Mercurio, 88. Venus y Mercurio no tienen movimiento retrógrado, nunca les puedes adelantar", concluye Marco.
"Los griegos no sabían todo esto. Pensaban que La Tierra era inmóvil y que todo giraba a nuestro alrededor. Por eso pensaban que los planetas hacían movimientos en bucle. Pero desde Copérnico y Galileo, esa creencia está obsoleta. Da igual lo bien que lo vendan los astrólogos. Es una pseudociencia".
Astronomía vs. astrología
Pedro Juan Martín es ingeniero y economista, y trabaja como profesor del Departamento de Comercialización e Investigación de Mercados de la Universidad de Murcia. Pero también es doctor en Antropología Social y sabe más de astrología que muchos de los chamanes o adivinos a los que entrevistó durante la preparación de su tesis, titulada Pensamiento Mágico y Creencia Paranormal. "Hay que desmontarlo desde dentro y, para eso, antes hay que conocerlo". explica.
Martín defiende que el pensamiento mágico es inherente al ser humano y que la astrología "siempre ha pertenecido a las clases altas". También apunta, de hecho, que la Universidad de Salamanca mantuvo Cátedra de Astrología hasta el siglo XVII. "Cautivó a mentes como las de Kepler, Newton o Copérnico", dice. "Lo cual no quita que a los astrónomos actuales les dé mucha rabia... ¡Con razón!".
Martín detalla que las interpretaciones astrales se apoyan en la mitología grecorromana (Hermes y Mercurio estaban relacionados con la comunicación) y que Mercurio Retrógrado es una interpretación geocentrista que forma parte de las creencias paganas que durante siglos han convivido con el cristianismo. En lugares como Centro América y el Caribe, de hecho, con mucha más fuerza.
"En España no se han hecho estudios, pero en EEUU la tasa de conocimiento del signo del zodiaco (92%) triplica a la del grupo sanguíneo", explica. "El consumo del horóscopo, de todas formas, no siempre responde a una creencia. También funciona como un mero entretenimiento".
Las ventajas de la magia
Martín recurre a los estudios del antropólogo escocés James George Frazer (La rama dorada) para explicar la lógica de la astrología —que se basa en la relación análoga entre el microcosmos y el macrocosmos— y, aunque reconoce que últimamente se ha banalizado y se ha usado para cometer todo tipo de estafas, también reivindica que el pensamiento mágico tiene ventajas.
Según un estudio de la Universidsad de Lancaster (Reino Unido) publicado en 2011, de hecho, la creatividad entre los niños de entre 4 y 6 años que habían visto Harry Potter era sensiblemente superior a la de los que no. "Hay creencias que son limitantes y otras que son potenciadoras. Pero es cierto que si te pasa algo malo y lo relacionas con una determinada creencia, se produce un anclaje", dice.
Da igual que parezca absurda: una vez establecida esa relación causa-efecto, ya no hay marcha atrás. María reconoce haber experimentado algo así. La mayor parte de sus decisiones vitales se basan en la evidencia científica, pero explica que "cuando estás en una mala racha y no encuentras explicación, necesitas agarrarte a algo y buscas atajos". Si le funcionó una vez, ¿por qué no iba a volver a funcionar?
"No tiene mucho sentido, pero si son cosas sencillas no pierdes nada y, si encima funcionan, ¡pues guay! Yo he llegado a poner un vasito con sal debajo de la cama y procuro no pasar por debajo de andamios o escaleras. Una vez llegué a limpiar mi casa con planta de ruda y en poco tiempo me pasaron un montón de cosas buenas que no habían sucedido en tres años. ¡Ese verano fue una revolución en mi vida!".
Carlos G. Cano
Periodista de Barcelona especializado en gastronomía y música. Responsable de 'Gastro SER' y parte del...