Detectan un agujero "inusual" en la capa de ozono sobre el Ártico

Madrid

La Agencia Espacial Europea (ESA) ha revelado, a través de un comunicado publicado en su página web, el hallazgo de un agujero "inusual" en la capa de ozono del Ártico. Un nuevo agujero, con una extensión máxima inferior a un millón de kilómetros cuadrados que, a pesar de lo que pueda parecer, no supone una amenaza directa para la salud de las personas, tal y como aseguran sus descubridores en la revista Nature.

La capa de ozono es una capa natural, situada en la estratosfera, que protege la vida en la Tierra de la radiación ultravioleta que emite el Sol. Una capa que, a medida que pasa el tiempo, va generando una serie de agujeros producidos por reducciones anormales de este gas. Todo ello como consecuencia, entre otras cosas, del aumento de la concentración de cloro y bromo en esta capa de la atmósfera terrestre situada a una altitud de entre 10 y 50 kilómetros.

Así es el nuevo agujero de la capa de ozono

Hasta la fecha, el agujero de la capa de ozono más conocido es el descubierto en durante los años 70 en la Antártida. Sin embargo, y gracias a las diferentes medidas tomadas parar la revertir la situación durante las últimas décadas, este se ha ido reduciendo de forma considerable. De hecho, y según las observaciones por satélite realizadas por el centro de referencia de la Unión Europea, el de 2019 ha sido el de menor envergadura de los últimos 35 años.

Mientras el agujero de la Antártida se reduce año a año, uno nuevo brota sobre las regiones polares septentrionales. A pesar de que ambos polos sufren un agotamiento del ozono durante el invierno debido a unas temperaturas extremadamente frías (por debajo de los 80 grados centígrados), nunca antes se había registrado un agujero de estas características en el Ártico, tal y como asegura el científico atmosférico del Centro Alemán Aeroespacial de Oberpfaffenhofen Martin Dameris,

Así se ha formado el nuevo agujero

Según han dado a conocer los investigadores, este nuevo agujero se ha formado debido a los fuertes vientos del oeste que han azotado el polo Norte y las masas de aire particularmente frías que ha habido en esta región como consecuencia de un "vórtice polar". Esto ha provocado que se formen nubes a gran altitud que han acabado destruyendo la capa de ozono y provocando el agujero ártico. 

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Principalmente desde la primera luz solar sobre el polo Norte, que inició este agotamiento de los niveles de ozono y facilitó la aparición del nuevo agujero de la capa de ozono. A pesar de ello, desde la Agencia Espacial Europea esperan que el agujero vuelva a cerrarse hacia mediados de mes y que no supondrá ningún problema para la salud. Un agujero que, pese a que no es tan grande como el registrado en la Antártida, ha sorprendido (y mucho) a la comunidad científica.