El origen de Trancas y Barrancas: sus primeros diseños y cómo podían haber sido

Madrid

Trancas y Barrancas se han convertido, con el paso de los años, en las grandes estrellas de El Hormiguero. Desde que aparecieran por primera vez en septiembre de 2006, las hormigas salen del pequeño hormiguero situado bajo la mesa de Pablo Motos cada noche para comentar el programa y, de paso, para poner a los invitados e invitadas en apuros. Desde entonces ya han pasado 14 años, y siguen manteniendo la frescura del primer día.

¿Sabías que podían haber sido completamente distintas? Como cada semana, Jorge Salvador ha vuelto al programa para hacer un repaso a los momentos más importantes de El Hormiguero a lo largo de sus 14 años de historia. En esta ocasión, y después de hablar sobre varios temas, Salvador se ha centrado en el origen de Trancas y Barrancas y en sus primeros diseños. Y es que, según cuenta uno de los máximos responsables del programa, podrían haber sido bastante distintas de haber seguido los planes originales.

Los primeros diseños de Trancas y Barrancas: cabezonas, con grandes colmillos y cuatro patas

De hecho, tal y como ha explicado frente la audiencia del programa, el plan inicial pasaba porque no fueran más que unos calcetines con ojos. Por suerte, Salvador convenció a Pablo Motos para llamar a un diseñador y que dibujara unas hormigas. Concretamente a Oscar Julve, quien realizó varios diseños para quienes un día serían Trancas y Barrancas.

Unos dibujos, que distan considerablemente del diseño final de las hormigas, pero que guardan la misma esencia que las originales. En estos primeros diseños, las hormigas tenían cuatro brazos y unos dientes mucho más afilados. A este le seguirían otros diseños en los que podemos ver a una hormiga con dos brazos y unas antenas retorcidas. También otra serie de hormigas cabezonas, con grandes colmillos y ojos saltones, que no terminaban de convencer a los responsables del programa.

Así nacieron Trancas y Barrancas

Tras varias pruebas, y después de valorar distintas opciones, los responsables se quedaron con el diseño del que meses más tarde sería Trancas. Una hormiga, que destacaba por sus grandes ojos, que contaba con un cuerpo mucho más pequeño que la de las anteriores y con unos dientes no tan pronunciados. Después de que los responsables del programa dieran el visto bueno al diseño, se pidió una versión de los mismos desarrollada a partir de plastilina.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Pero eran demasiado grandes. Por suerte, consiguieron hacerles un hueco bajo la mesa de Pablo Motos y, desde entonces, no se han marchado. De hecho, y con el objetivo de homenajear a las hormigas, Salvador ha recuperado su primera aparición en televisión. Y, a pesar de que las hormigas han ido cambiado ligeramente de aspecto durante estos últimos años, siguen manteniendo esa estética que les ha convertido en las hormigas más famosas de la televisión.