"De cajera a ministra" y "señora de": el ataque machista en televisión que De la Riva dedicó a Irene Montero
De la Riva se refiere a la ministra como la "señora, esposa o pareja del vicepresidente" y se sorprende de que eso sea un "micromachismo"
Madrid
El que fue alcalde de Valladolid entre 1995 y 2015, Javier León de la Riva, ha sido objeto de debate en muchas ocasiones por sus polémicos comentarios hacia las mujeres. La última que le ha hecho protagonista han sido los ataques hacia la ministra de Igualdad, Irene Montero, tras el acto del 25-N en el que rompió a llorar durante su comparecencia.
Ha sido durante una tertulia en la televisión de Castilla y León, donde De la Riva se ha permitido tachar de "numerito" las lágrimas de Montero, a la que ha asegurado que "no se cree".
Ironiza con que se trate de un micromachismo
“A lo mejor llora porque piensa que la van a cesar” ha bromeado el exalcalde. Además, se ha referido a ella como "señora, esposa o pareja del vicepresidente", para insinuar que gracias a ello es por lo que dirige "un ministerio que no existía en ningún sitio".
Ante estas palabras una representante del colectivo feminista, partícipe en el debate, se ha pronunicado para indicarle que eso es un "micromachismo" y le ha dicho que no iba a permitir que se riera de los sentimientos de una persona.
"Ah, ¿esto es un micromachismo?" se sorprendía el popular, que ironizaba: "Fíjate, pasar de cajera a ministra es un carrerón político de mucho cuidado”.
Otros comentarios machistas durante su trayectoria
De la Riva ya ha sido objeto de crítica por los comentarios que ha espetado hacia algunas mujeres como Leire Pajín cuando era Ministra de Sanidad, Iguadlad y política Social, a la que se refirió como "una chica preparadísima, hábil, discreta, que va a repartir condones a diestro y siniestro por donde quiera que vaya y que va a ser la alegría de la huerta”, después de destacar que iba a guardarse lo que opinaba de sus "morritos".
También de 2014 ofreció unas duras reflexiones sobre las agresiones sexuales: “Tú piensa que entras en un ascensor y hay una chica con ganas de buscarte las vueltas. Se mete contigo en el ascensor, se arranca el sujetador o la falda y sale dando gritos de que la has intentado agredir. Por lo tanto, ojo con ese tema, que tiene doble lectura. De ida y de vuelta”