Las personas con gafas tienen tres veces menos de probabilidades de infectarse, según un estudio
Llevarse las manos a la cara es una importante vía de contagio y, quienes llevan gafas, no lo hacen tan a menudo
Madrid
Desde el inicio de la pandemia, las autoridades sanitarias han recomendado evitar el contacto de las manos con la cara para evitar contagios por el nuevo brote de coronavirus. Dado que aquellas personas que llevan gafas tienen a frotarse menos los ojos que el resto, un estudio desarrollado por un grupo de investigadores indios que ha sido recogido recientemente el diario The Telegraph ha llegado a la conclusión que también tienen menos probabilidades de contagiarse por la COVID-19.
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Llevarse las manos los ojos sin haberlas lavado previamente es una importante vía de transmisión. Es por ello que aquellos individuos que llevan gafas son entre dos y tres veces menos propensos a contraer el virus, ya que no realizan esta acción con tanta frecuencia como una persona promedio.
Muy pocos pacientes que utilizan gafas han sido hospitalizados por COVID-19
Desde que las autoridades chinas detectaran el brote de COVID-19 en la ciudad de Wuhan en diciembre de 2019, el número de usuarios hospitalizados que llevaban gafas era inferior al resto, tal y como lo explican los científicos en el estudio publicado en la revista JAMA Ophtalmology.
Para realizar este estudio, sus investigadores contaron con 304 sujetos de estudio, entre ellos 223 hombres y 81 mujeres. Todos ellos tenían entre 10 y 80 años y presentaban síntomas de COVID-19. Las pruebas se realizaron en el hospital Suizhou Zengdu, situado en el norte de la India, entre el 26 de agosto y el dos de septiembre. Todos los participantes fueron sometidos a un cuestionario donde alrededor de un 19% informó que usaba gafas parte del tiempo.
El uso prolongado de gafas evita frotarse los ojos y previene el contagio
"El presente estudio mostró que el riesgo de COVID-19 era aproximadamente dos o tres veces menos en la población que usa gafas que en la población que no las usa", señala el estudio. Las conductas lagrimales son una importante ruta de transmisión del virus que conecta con la cavidad nasal. Es por ello que los usuarios que utilizan gafas durante más de ocho horas diarias previenen en una gran medida esta vía de contagio.
"Un individuo tiene el hábito de tocarse la cara en promedio 23 veces en una hora y sus ojos en promedio tres veces por hora", según el estudio. "El uso prolongado de gafas puede evitar que los ojos se toquen y froten repetidamente", añade.