Corinna Larsen planeó dejar a Juan Carlos I el 30% de los ingresos de un fondo, según 'El País' y 'La Sexta'
El monarca hubiese obtenido un tercio de los ingresos del Fondo de Inversiones Hispano Saudí, que previamente fue patrocinado por él mismo
Madrid
Los Papeles de Pandora destapan otro plan que relaciona al rey Juan Carlos I. Corina Larsen dispuso que, en caso de morir, se entregaran un 30% de los ingresos del Fondo de Inversiones Hispano Saudí a su expareja, el rey Juan Carlos I, tal y como han avanzado El País y La Sexta. El activo que hubiese recibido el monarca provenía de un fondo que fue patrocinado previamente por él mismo, y en el que Larsen trabajó previamente.
Más información
La documentación a la que han tenido acceso ambos medios establece que Larsen estableció un fideicomiso -una figura encargada de administrar el patrimonio de un particular y que actúa a través de sus instrucciones- denominado Peregrine.
En caso de que Larsen falleciese, sus dos hijos recibirían junto a Juan Carlos I los activos de este fondo "a partes iguales".
En un documento al que han tenido acceso El País y La Sexta, la propia Larsen deja clara su voluntad de que el monarca, que por aquel entonces continuaba en ejercicio de sus funciones, recibiera los activos. "En caso de mi muerte, quisiera que tuviera en cuenta los deseos de las personas mencionadas anteriormente", reza el escrito.
Además de esta nota, figura otra creada apenas minutos después en la que sustituye el nombre del monarca por un espacio en blanco y una mención a "Mister X", en sustitución de Juan Carlos I.
El fondo, tal y como recogen ambos medios, fue creado a iniciativa del monarca y del exministro de Asuntos Exteriores de entonces, Miguel Ángel Moratinos. El objetivo era fortalecer las relaciones con Arabia Saudí. Fue en junio de 2007 cuando, cuentan El País y La Sexta, se hizo oficial la creación del fondo tras la imposición del toisón de oro al rey saudí de entonces, Abdalá Bin Abdelazziz; acto al que también acudió Larsen.
Un año después de la creación del fondo, el ministerio de Finanzas saudí transfirió alrededor de 65 millones de euros a una fundación panameña cuyo primer beneficiario era Juan Carlos I.
Sin embargo, el fondo terminó por disolverse apenas tres años después, en 2010, al no recibir las aportaciones saudíes que por entonces se esperaban. El abogado de Larsen en Londres, Robin Rathmell, niega que esa estrategia existiera y asegura que la documentación es falsa, tal como recoge El País.