Prohibido dejar a un perro solo más de 24 horas y otros detalles de la futura ley de protección animal
La ley de protección animal que quiere impulsar el Gobierno prevé una mayor regulación de la cría de animales y la prohibición en todo el país de actividades que los hacen sufrir, como las peleas de gallos
La intención es que llegue al Congreso en enero, esté lista en verano y entre en vigor en 2023
Perro adoptado. / EFE/Brais Lorenzo
Madrid
La ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ha presentado los detalles de la futura ley de protección animal que quiere impulsar el Gobierno. Prevé una mayor regulación de la cría de animales, la prohibición en todo el país de actividades que los hacen sufrir, como las peleas de gallos, y por ejemplo, no se podrá dejar a un perro solo más de 24 horas.
El principio fundamental de esta ley, que se prevé que llegue al Congreso en enero, esté lista en verano y que entre en vigor en 2023, es llegar al sacrificio cero, aunque es necesario conseguir antes el abandono cero para evitar problemas a las entidades que tienen que gestionar los animales abandonados.
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La ley apuesta por mejorar del registro de los animales de compañía y su control poblacional para evitar los abandonos. Se instaurarán el Sistema Estatal de Registros de Protección Animal, que incluirá un registro estatal de animales de compañía, de entidades de protección animal, de criadores, de núcleos zoológicos de animales de compañía, de profesionales del comportamiento animal y de inhabilitados para la tenencia.
Prohibida la cría por particulares
El veterinario solo podrá implantar microchip a entidades de protección animal o criadores registrados, el resto de animales están obligados a pasar un proceso de regularización para poder ser registrados. Además, los criadores están obligados a identificar a sus animales antes de venderlos.
El proyecto prohíbe la cría por particulares, y establece que solo los criadores acreditados, tras superar un proceso de formación y con un núcleo zoológico para animales de compañía en regla (que también será estatal) podrán criar animales.
Además, los animales tendrán que ser esterilizados antes de cualquier transmisión, ya sea venta, cesión o adopción con algunas excepciones. Si un particular tiene animales de distintos sexos, o los machos o las hembras tendrán que ser esterilizados para evitar la cría accidental. También aquellos que tienen acceso sin supervisión al exterior.
Se restringe la venta de animales en tiendas
También se restringe la venta de animales en tiendas, como ya ha propuesto Francia, de forma que la venta de animales estará únicamente permitida por criadores.
El visón americano no puede ser animal de compañía
Se va a elaborar también un listado de animales exóticos que podrán ser tenidos como animales de compañía, estando prohibido el resto. Dentro de estas especies se incluye al visón americano, pues ha considerado que esto es una cuestión de salud pública, al ser un vector de transmisión del Covid-19.
El proyecto también plantea restringir la cría y compra de animales por zoológicos, a excepción de algunos supuestos como la reintroducción o la mejora genética de especies, siguiendo los pasos del zoo de Barcelona.
Va ha haber también un registro nacional de inhabilitados que este se cruzará con el de animales de compañía para, impedir automáticamente que una persona inhabilitada pueda registrar un animal sin que el veterinario tenga que negarse a ello.
Un perro no pueda estar más de 24 horas solo
La ley va a establecer también que un perro no pueda estar más de 24 horas sin la supervisión de una persona, con la excepcionalidad para perros pastores.
Prohibido el tiro al pichón y peleas de gallos
También establecerá la prohibición de tiro al pichón y peleas de gallos. No se incluye ninguna medida relacionada con la tauromaquia, porque dificultaría mucho la tramitación de la norma.
Otra de las novedades que ha compartido el director general es que finalmente incluyen la reforma de perros potencialmente peligrosos en la Ley de Protección Animal. La intención es ampliar la ley de animales potencialmente peligrosos en lo relativo a perros, mientras que en el resto se mantendrá de la misma manera.
La raza no determina la peligrosidad del perro
Para decidir qué perros pueden suponer una amenaza para la seguridad ciudadana se tendrá en cuenta su comportamiento, y no estará determinado por su raza. Se está elaborando un sistema de validación para estimar el comportamiento agresivo de los perros que por características corporales, principalmente su peso, puedan tener potencial de dañar a una persona. Estos perros serán considerados como de "manejo especial" y no "potencialmente peligrosos".
Además, ha adelantado que se permitirá que mediante la modificación de comportamiento se pueda reconducir a estos animales, que tendrán la oportunidad de enfrentarse al sistema de validación de nuevo para dejar de ser de manejo especial.
