El PP pide declarar para declarar que nada tiene que declarar
El representante legal del PP interrumpe el juicio para recordar al tribunal y la Fiscalía que le habían saltado en el turno de declaración, pedir la vez, y una vez concedido el plácet manifestar que no tenía nada que decir
Madrid
El juicio por las actividades de la trama Gürtel en Boadilla ha vivido este martes una situación sorprendente, que ha sonado a “tomadura de pelo” y a “muestra de la escasa colaboración con la justicia” de la formación conservadora, según fuentes jurídicas presentes en el interrogatorio.
Concluía el trámite de toma de declaración a los acusados y la Fiscalía y el Tribunal procedían a dar paso a los testigos del procedimiento, cuando el letrado del Partido Popular, acusado como partícipe a título lucrativo en la causa, Jesús Santos, ha llamado la atención de la sala porque se habían olvidado de él: “entiendo que la Fiscalía renuncia a la declaración del representante legal del Partido Popular”, ha dicho Santos. “No, no ha renunciado”, ha replicado la fiscal Concepción Nicolás, para a continuación, recibir las disculpas implícitas por el olvido del presidente del Tribunal, José Antonio Mora, quien tras reconocer a Santos que tenía “toda la razón”, le ha preguntado quién iba a declarar en nombre del partido.
El letrado del PP ha comunicado que él mismo iba a asumir la “representación legal” de la formación y acto seguido, se ha negado a contestar las dos preguntas formuladas por el Ministerio Público para limitarse a decir que el PP “nada puede declarar, nada puede aportar sobre las circunstancias de los hechos que son objeto por parte de la acusación del Ministerio Fiscal”. Santos ha recalcado que el Partido Popular “no tiene nada más que decir”, más allá de recordar que como partícipe a título lucrativo, carecía de conocimiento de los hechos supuestamente delictivos que se enjuician.
El PP sostiene que nada tiene que declarar para aportar luz a la causa, pero casi todos los acusados han relacionado tanto a la dirección nacional como a la regional en el conocimiento y el diseño de la estrategia para la financiación ilegal del partido, así como en las órdenes explícitas a los alcaldes con el objetivo de que adjudicaran obra pública a cambio de comisiones a las empresas donantes de fondos en b para la formación conservadora.
Este martes también ha declarado Alicia Vallejo, la expareja del exalcalde de Boadilla, Arturo González Panero, quien ha negado que conociera los negocios fraudulentos en el extranjero de éste, o la operación para la venta de su domicilio en el municipio, con participación de la trama. Vallejo ha declarado que vivió “un infierno” en su relación con el albondiguilla por los ataques de su hijo, y que siente “vergüenza” por haber mantenido una relación con el exalcalde y por la corrupción que ha descubierto en la causa.
Además, ha comparecido como testigo el denunciante de la Gürtel, José Luis Peñas, quien ha recalcado el “extraordinario poder” del líder de la trama, Francisco Correa, de quien ha asegurado que era “el número 3 en Génova” por su influencia en el partido durante la época de José María Aznar como presidente.
Peñas también ha recordado que diversos integrantes de la trama como el exdiputado regional, Alfonso Bosch, o el exviceconsejero Alberto López Viejo, viajaban con asiduidad “en el Falcon” (en referencia al avión utilizado por los presidentes del Gobierno) con Aznar durante las campañas electorales.