La mayoría de españoles confía en el bipartidismo para resolver los grandes retos de país

Madrid

España es un país con un Congreso fragmentado en 19 partidos, donde solo 5 de las 17 comunidades autónomas tiene un gobierno monocolor y en el que se aprueban Presupuestos Generales del Estado gracias al concurso de 15 formaciones políticas. Pero España es también el país en el que una gran parte de sus ciudadanos cree que la respuesta más eficaz a los grandes problemas del futuro vendrá de la mano de los representantes del 'viejo bipartidismo'. A la pregunta de ¿quién crees que está más capacitado para ello?, los encuestados en el barómetro de 40dB para la SER responden, en un 75% de las veces, entre dos opciones: PSOE y PP. Solo en tres supuestos, de índole más social como la crisis climática o la lucha contra las desigualdades, se considera más capaz al PSOE junto a Unidas Podemos.

Pero la paradoja presenta matices. Lo primero que se desprende de los datos del sondeo es que existe una profunda desconfianza hacia la política en general. La ciudadanía no la percibe como una solución a los principales desafíos. En 10 de los 12 planteados (lucha contra la COVID, desigualdades o mejora de la economía) la respuesta mayoritaria es que ninguna formación está preparada para hacerles frente. El porcentaje de escépticos se dispara hasta el 30,4% cuando se aborda el envejecimiento y las bajas tasas de natalidad o hasta el 29,5% para la crisis climática. Las políticas públicas dirigidas a paliar estos problemas parecen no aportar certidumbres a la población.

Eso sí, entre los que se decantan por elegir unas siglas políticas para encarar esos retos, la mayoría prefiere al PSOE por encima del PP. Lo hace en todos los casos: vence tanto en las medidas económicas (baluarte tradicional de los de Casado) como en las reformas sociales. En la lucha contra la COVID la distancia entre ambos es de 12 puntos—25,5% frente al 14,4— de 8 en la gestión de los fondos de Recuperación y Resiliencia —25,2% frente a 17,7— y de 7 en la visión sobre el futuro del sistema público de pensiones —22,3 frente a 15,4—. La diferencia se estrecha y se queda en un punto cuando se trata abordar la mejora de la economía —22,4% frente a 21—. Mismo margen que los socialistas tienen con sus socios de Unidas Podemos en la lucha contra la desigualdad de género.

BARÓMETRO SER / EL PAIS

<p>La derecha gana terreno pese al aprobado general a las políticas del Gobierno.</p>

Los votantes del PSOE desconfían de Unidas Podemos

En un análisis más detallado, se observa la desconfianza que Unidas Podemos genera entre el electorado del PSOE. Algo que explicaría, según la primera entrega del barómetro, la escasa transferencia de votos que hay desde los socialistas a los morados, un 4%. Los que optaron por la papeleta de Pedro Sánchez en 2019 eligen como segunda opción al PP para siete de los doce desafíos: la creación de empleo, el crecimiento de la economía, la gestión de los fondos europeos, la lucha contra la pandemia o la digitalización. Al contrario, el electorado de Unidas Podemos sí elige al PSOE como segunda respuesta en la mayoría de los supuestos.

Es significativa la opinión de los votantes socialistas en cuanto a la solución del conflicto catalán. El 46,6% cree que el más capacitado para ello es el partido al que apoyaron hace dos años. Un 19,4% asegura que no ve a ninguno eficaz. Pero entre el resto de opciones posibles, el electorado de Sánchez asegura que Vox (en un 9,5%) tiene una mejor respuesta al desafío soberanista que el PP (7,9%) o que sus propios socios de coalición, a los que dan menos de la mitad de puntos que a la ultraderecha (4,25). Entre el resto de formaciones se produce un orden de respuesta lógico.

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La cogobernanza decepciona a la mayoría

En líneas generales, las medidas tomadas por el Gobierno para combatir la COVID-19 cuentan con el respaldo de la mayoría de la población, al margen de su ideología. Un 55% de los encuestados considera positivo que se declarar el estado de alarma y el confinamiento estricto antes del desarrollo de las vacunas. La campaña de inmunización colectiva es de hecho la estrategia con más consenso social. Un 63% considera que ha ido bien o muy bien. El apoyo está, evidentemente, más extendido entre los votantes de izquierdas. Los ciudadanos solo ponen un suspenso: a la cogobernanza con las comunidades autónomas. Un 61% se considera decepcionado o cree que no ha sido eficaz.