Una belga de 19 años se convierte en la mujer más joven que da la vuelta al mundo volando en solitario
Uno de los objetivos de Zara Rutherford era visibilizar la brecha de género en profesiones científicas
El ultraligero de Zara Rutherford. / FLY ZOLO
Madrid
Zara Rutherford se acaba de convertir en la mujer más joven de la historia que completa una vuelta al mundo volando en solitario. Lo ha hecho en cinco meses y a bordo de un ultraligero llamado Shark.
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La joven belga, de solo 19 años, inició su viaje en Bélgica el 18 de agosto de 2021 y, desde entonces, ha volado siempre en dirección oeste, a una velocidad aproximada de 300 kilómetros por hora, recorriendo 52 países de los 5 continentes: Reino Unido, Islandia, Groenlandia, Canadá, EEUU, Rusia, Indonesia, India, Arabia Saudí y, atravesando Europa, ha vuelto a llegar a Kortrijk (Bélgica).
Este miércoles, al completar su penúltima etapa, aterrizó en la localidad alemana Egelsbach y aseguró ante los medios de comunicación que, pese a todo, no volvería a embarcarse en una aventura así porque, aunque ha vivido momentos increíbles, también ha llegado a temer por su vida.
Según detalla en la página web del proyecto, el Shark es una aeronave con capacidad para dos personas, construido con fibra de carbono, que destaca por su rapidez y por contar con una autonomía de 1.600 kilómetros.
Dos récords Guinness
Rutherford perseguía batir dos récords Guinness: superar a Shaesta Waez (que en 2017 lo logró a sus 30 años) como la mujer más joven en dar la vuelta al mundo volando en solitario, y también en ser la primera mujer que lo consigue a bordo de un ultraligero. Cinco meses y 51.000 kilómetros después, ha logrado ambos.
La joven belga, que se sacó la licencia de vuelo en 2020, creció en una familia repleta de aviadores y apasionados por la aviación, pero ha querido dotar a su aventura de un sentido más reivindicativo.
"La brecha de género es enorme"
"Solo el 5% de los pilotos comerciales y el 15% de los ingenieros informáticos son mujeres. La brecha de género es enorme y lo es desde la infancia debido a los modelos que nos enseñan. Los chicos crecen con juguetes, nombres de calles y clases de historia que les instan a ser científicos, astronautas o empresarios. A las niñas se las anima a ser guapas, atentas y cariñosas y dulces. Con mi viaje quiero demostrar que también podemos ser ambiciosas y hacer que nuestros sueños se hagan realidad", ha asegurado.
En la web de Fly Zolo, de hecho, aparecen reseñas de algunas de las mujeres que han inspirado su hazaña: Lillian Bland (la primera mujer que diseñó y construyó su propio avión), Bessie Coleman (la primera afroamericana e indígena americana con licencia de vuelo), Valentina Tereshkova (la primera mujer que fue al espacio) y Amelia Earhart (la primera mujer que atravesó el Atlántico pilotando un avión).
