Esther García Llovet: "Benidorm me parece una ciudad ingobernable, a ver si se va a independizar, como Madrid"
La escritora malagueña nos presenta 'Spanish Beauty', primera entrega de la Trilogía de los países del Este. Ubicada en Benidorm, hablamos de corrupción policial, mafias, pelotazos urbanísiticos y políticos
Esther García Llovet: "Benidorm me parece una ciudad ingobernable, a ver si se va a independizar como Madrid"
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Madrid
Esther García Llovet (Málaga, 1963) acaba de publicar Spanish Beauty, editado por Anagrama, el primer libro de una entrega que se llama Trilogía de los países del Este. Viene de completar una Trilogía instantánea de Madrid, con tres novelas: 'Cómo dejar de escribir', 'Sánchez' y 'Gordo de feria'. Las tres construidas en Madrid. Ahora, con Spanish Beauty, nos traslada a un cielo electrónico. Las letras: rojas. Cuadradas: Benidorm.
Recibimos a la escritora a ritmo de 'Ingorbernable', de C. Tangana, que es uno de los cantantes que suenan en esos chiringuitos que describe Llovet en su novela. "Benidorm. Cultura barata. Cultura de playa. Gente que habla tres idiomas sin tener el bachillerato, paquis, belgas, gin tonics aguados, gays. Libros de Tom Clancy de segunda mano, hinchados por la humedad, crujientes de arena, arena en la almohada, arena en la paella, en el tanga, en la ducha, desayunos de salchichas y Bacon a cualquier hora del día, masajes tailandeses a cualquier hora del día, chicharras de noche".
¿Es Benidorm una ciudad ingobernable, como canta C. Tangana?
Cuando estaba viniendo para aquí, por la Gran Vía, que también tiene un poco de Benidorm, yo pensaba: a ver si ahora Benidorm va y se independiza, con toda la gente que tiene dentro (se ríe). Yo no sé si votan y, si votarían, a qué votaría toda esta gente. Es ingobernable, es que hay tanta gente tan distinta y todos van a lo mismo, que me parece fascinante. Gente de todas partes del mundo, menos de Yakarta, yo creo que de ahí no viene nadie. Tiene esta cosa como feliz para todo el mundo.
Una ciudad, leo, que no hace historia, hace sangría: vacaciones de doce meses, borracheras de una semana, ocio de 24 horas y delincuencia, trapicheo, escaramuzas, pelotazo urbanístico y político. Cómo de bien conoces Benidorm
Pues la verdad que estuve muy poco tiempo, al principio dos o tres días para hacer un reportaje, yo ponía el texto y Ricardo Casas las fotos. Me gustó tanto el sitio, que dije: yo tengo que volver aquí, que pase algo aquí, tengo que escribir una novela en la que pase algo aquí. La siguiente vez que volví, que fue para escribir el texto, estuve solamente cuatro días, pero me supieron a poco y volví otra vez. Estuve hablando mucho tiempo, entrevistando y hablando con gente que vive allí toda la vida. Que tienen también otro tema más (se ríe).
A C. Tangana lo escuchamos en uno de los chiringuitos de Spanish Beauty. Detrás de los chiringuitos "esos rascacielos que se iluminan como los ecualizadores de una mesa de mezclas. Todo viene con música, en Benidorm", reza la novela. [Ponemos a Julio Iglesias]. La última vez que estuve en Benidorm, el verano pasado, todavía escuché en varios locales a Julio Iglesias a todo trapo. Parece que el tiempo se detiene en Benidorm, una ciudad, como dices en el libro, en la que se puede hacer de todo sin que nada pase al final.
El tiempo está detenido en Benidorm. No solamente va a gente muy mayor, porque el Sol es muy bueno para ellos, sino que la gente del Imserso se mezcla con una panda de veinteañeros ingleses. Si vienes para lo que vienes, te encuentras en Benidorm a gente de todas las edades.
No sé si ingobernable, pero la protagonista es Michela, Michela Mckay, una agente de policía truhana, que vive de engaños y estafas, una corrupta a la que no le gusta la gente que llama a la policía. Protegida en la policía nacional de España y a la que nadie ha tocado un pelo en 15 años. Menudo personaje, en quién te has inspirado
(Se ríe). La verdad es que no sé de dónde ha salido ella. Veo mucho más cine que literatura negra. El cine negro me apasiona. Creo que he comido tantísimo Tarantino y he visto tanto cine negro, que es el típico personaje, pero me faltaba ver todavía la política corrupta. El poli corrupto lo hemos visto ya muchas veces
Estos personajes, el de ella y otros en la novela, al final son unos pobres desgraciados que buscan cómo sobrevivir
Es que yo creo que la novela negra viene de ahí. A mí por lo menos la literatura o la gente en la realidad que me interesa, no es gente que está bien amoldada ni en la realidad. Esa gente me parece rara, porque yo no lo estoy. Este tipo de personajes te da juego literariamente o para una peli.
Michela trata de recuperar un mechero que perteneció a los gemelos Kray, esos mafiosos que gobernaron el Londres de los 70. El dinero sigue siendo de nuevo un tema recurrente, aunque a la protagonista, dices en la novela, no le interesa el dinero en sí, sino dónde está.
El tema del dinero es recurrente porque es gente que vive al borde de la precariedad, pero en el sentido muy individualista. Te aseguro que ninguno de ellos vota a Podemos, son gente que se está buscando la vida y van a lo suyo, pa pa. Literariamente me viene bien en ese sentido. Y el mechero, por cierto, existe. No sabía qué quería de los hermanos Kray y me metí en Christie's, que tiene una página de subastas, y el mechero existe tal cual.
¿Y no has pujado por él?
(Se ríe). Qué cosas me dices, en la próxima entrevista te diré algo.
[Ponemos The Wire]
Otro tema recurrrente es este de la serie The Wire, que tararean varios personajes. Y es que es otro libro con una narración muy cinematográfica, como los anteriores. A ti, que tanto te gusta el cine y que lo has estudiado, dirección de cine, este también da para una serie, como Crematorio, sobre corrupción en Valencia, o una película. ¿Te lo has planteado, te gustaría?
Me ha inspirado muchísimo The Wire, que tenía un tipo de tiempo que se salía por completo de lo que tenemos pensado como género negro. The Wire era un tiempo lento muy raro, me acuerdo de una escena que tenía que pasar un sofá de una habitación a otra, que era un disparate, que no iba a ninguna parte y me pareció maravillosa. También veo muchas series, me gustó mucho Ozark, un serión serio. Crematorio no la he visto, porque no tengo esa plataforma, pero sí que me gusta mucho, porque el género negro te permite, en series de televisión, te permite serializar un personaje mucho mejor. En cambio, en la literatura, echo de menos que el personaje se desarrolle más allá de lo que está haciendo en la novela.
Y sí, estamos en ello, en hacer una película. No dirigirla yo, porque se me va de madre, pero esto si se está intentando colocar para hacer una peli, ojalá.
Qué quieres retratar en esta trilogía de los países del este. Aquí hay mafiosos ingleses, hay millonarios rusos, también turbios...
Al principio no iba a ser una trilogía, pero fui a hacer la portada de Spanish Beauty, porque las fotos de portada suelen ser mías, y se me ocurrió que antes de tener la portada, había que poner en la contraportada que esto tenía que ser una trilogía. Porque quiero hacer otra cosa que pase también, no en Benidorm, sino en El Saler, al sur de Valencia. La que estoy escribiendo es terrorífica.
No paras, de hecho esta entrevista teníamos que hacerla por la tarde, porque por las mañanas sueles estar escribiendo. Ya estás con el siguiente. ¿Cómo se digiere esa voracidad creativa?
Qué voracidad (se ríe). Ningún problema, de hecho ya tengo las notas para la tercera de la trilogía. Intento no coger el teléfono mucho por la mañana, porque si no ya me distraigo. A lo mejor tengo que empezar a escribir por la noche, pero las cosas que se escriben por la noche son muy distintas a las de por la mañana, no sé porqué. Estoy con esta segunda, que me gusta mucho el tono que tiene, Y me sorprende que haya tardado tanto tiempo en abordar el terror, cuando el terror es un género que a mí me encanta. No sé si has visto It Follows, es maravillosa.
Es otra novela breve, de 132 páginas. ¿Por qué, si daría para mucho más lo que en ella aparece y sus personajes?
Porque mi intención es lo que tú has dicho, no me importa decirlo, es hacer películas. Siempre escribo cosas que se puedan fácilmente adaptar. También la que estoy escribiendo ahora y la siguiente. Soy muy transparente, yo quiero hacer películas.
Tiene humor, pero un humor más negro, más chungo, como prometías. Hablando de humor, tú has adaptado el cuento de navidad de la ser de este año, el de Pinocho. Buenísimo. Otro tipo de humor radicalmente diferente
Quería escribir algo luminoso, era el día de Navidad. El Pinocho original es oscuro y muy siniestro. Entonces quería escribir algo que fuera para todos y, ya que los niños lo han pasado tan mal todo este puñetero año, que la gente se ría, tenemos que reírnos otra vez y mucho más.
Un par de frases del libro para terminar: Aquí lo que estamos es siempre muy enfadados y muy quemados y no precisamente por el sol. Sobre el hedonismo español, ese hedonismo dionisíaco que deben ver solo los turistas y las agencias de viajes. ¿Por qué estamos tan quemados y enfadados los españoles, tan polarizados, qué crees?
La verdad es que no creo que estemos tan quemados. Fíjate que, con la pandemia, me he dado cuenta de todas las cosas buenas que tenemos aquí. Me ha hecho falta una pandemia, y con una ha sido suficiente, no quiero más, pero me he dado cuenta de que me gusta lo solidaria que ha sido la gente de muchas maneras. Creo que tenemos un pronto fácil, pero también un sentido del humor importante.
La isla de Benidorm, esa roca rematada con una bandera de España hundiéndose sin remedio en un abismo de 5 m, cubierta de matorrales de espino y plumones de gaviota y guano. Es el sitio preferido de Michela cuando está harta de todo el mundo. ¿Es así como podemos concebir España, la belleza española, the spanish beauty?
(Se ríe). Está formada la frase de manera que parece que es España la que se está hundiendo. Fui al islote este y fui incapaz, yo que camino muchísimo, de llegar arriba. Hacía tanto calor y era tan empinado, que dije: este sitio tan inhóspito solo le puede gustar a la pava esta. Pero me gusta tener algo que te permita ver Benidorm desde lejos. Me pareció fascinante, espectacular. Y puede ser perfectamente una metáfora de España.
¿Al final se acaban pareciendo todas las ciudades, como decías, que vas caminando por Madrid y podría ser perfectamente Benidorm?
Vamos a ver, yo creo que las personas y las ciudades tienen muy poco que ver. Nada tiene que ver un gallego con un valenciano. Y lo que hacen las ciudades son las personas, por eso Benidorm me parece tan particular, porque tiene mucha gente y gente de paso. Es una ciudad que también está de paso de sí misma, todo el tiempo renovándose. Precisamente España es de una diversidad, cada ciudad es distinta, no me imagino a Benidorm, por ejemplo, en Galicia.
A lo mejor en Navidad, Vigo y sus luces...
Se ríe.
Y acabamos bailando al ritmo de Rod Stewart, que le encanta a Michela Mckay, la protagonista de Spanish Beauty, y también a Esther García Llovet. Puedes escucharlo dándole al play de la entrevista.