Suleiman, uno de miles de jóvenes asesinados en la guerra civil siria, recibe una sepultura digna diez años después

Casi 160.000 personas murieron en Siria durante la guerra que Al Assad llevó a cabo contra la población que se relevó contra el régimen. Uno de ellos fue el joven Suleiman, asesinado en 2014 con 27 años.

Su padre pudo desenterrarlo solo un mes después de la caída del dictador, en la región de Deera, donde fue ejecutado y enterrado. Su madre muestra el anillo que aún portaba el esqueleto y gracias al que pudieron identificar los restos de su hijo.

Un año después del final de la dictadura, la familia de Suleiman pudo recuperar su cuerpo, identificarlo y enterrarlo en un cementerio. Para ello tuvo que esperar 10 años. Aún esperan que el general que ordenó su muerte sea juzgado en los tribunales.