Los socios europeos han anunciado en la noche de este lunes en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU que emitirán sanciones contra Rusia en respuesta al envío de tropas por parte de Moscú a las regiones de Donetsk y Lugansk, cuya independencia ha reconocido Rusia este lunes. «Con nuestros socios europeos estamos preparando sanciones específicas contra aquellos que tomaron parte en esta decisión ilegal», ha dicho en la noche de este lunes el embajador francés ante la ONU, Nicolas de Rivière. Por su parte, la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, ha dicho en el encuentro de emergencia que la afirmación del presidente ruso, Vladimir Putin, de que ha enviado a la región «fuerzas de paz» es una «tontería». «Este movimiento del presidente Putin es claramente la base del intento de Rusia de crear un pretexto para una mayor invasión de Ucrania», ha resaltado, agregando que ha «destrozado los acuerdos de Minsk». «En esencia, Putin quiere que el mundo viaje en el tiempo. A una época anterior a Naciones Unidas. A una época en la que los imperios gobernaban el mundo. Pero el resto del mundo ha avanzado. No es 1919. Es 2022», ha remachado. La comunidad internacional se prepara este martes para anunciar sanciones contra Rusia tras la decisión del presidente de ese país, Vladimir Putin, de reconocer la independencia de las autoproclamadas repúblicas prorrusas de Donetsk y Lugansk, en territorio ucraniano, y de desplegar al ejército para ejercer «funciones de pacificación». Según la comunidad internacional, la decisión de Putin supone enterrar los acuerdos de Minsk para un arreglo pacífico en la región del Donbás, además de un atentado contra la integridad territorial de un estado y una modificación forzada de las actuales fronteras en Europa. Estos son los últimos acontecimientos, a la espera de que este martes continúen las reacciones de la comunidad internacional: La última decisión de Rusia: Militares rusos se desplegarán en los territorios de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, reconocidas este lunes por Moscú, para ejercer funciones de pacificación, según sendos decretos firmados por el presidente, Vladímir Putin. Según estos decretos, los militares rusos «garantizarán la paz» en esos territorios hasta la firma de acuerdos de Amistad, Cooperación y Ayuda Mutua entre ambas entidades y Moscú. Los decretos fueron firmados después de que Putin tomara este lunes la decisión de reconocer la independencia de Donetsk y Lugansk, una vez que la Duma (Cámara Baja del Parlamento de Rusia) le enviara el pasado 15 de febrero una resolución para instarle a dar ese paso. El representante de Rusia ante el Consejo de Seguridad de la ONU dijo hoy que su país «no quiere un baño de sangre en Donbás» (región del este de Ucrania) y aseguró que hay «un pánico infundado a la invasión de Ucrania» en los países occidentales. La sesión había sido solicitada de urgencia a petición de Ucrania como respuesta al anuncio del presidente ruso Vladimir Putin de reconocer los estados autoproclamados de Donestk y Lugansk (que forman la región de Donbas) y el posterior envío de tropas a estos dos enclaves, un anuncio que ha agravado un conflicto que viene fraguándose desde hace varias semanas. El embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia, escuchó impertérrito las declaraciones de los países miembros del Consejo, que en su mayoría condenaron el atentado contra la integridad territorial y la soberanía de Ucrania, con las notables excepciones de China e India, se que limitaron a genéricos llamamientos a la diplomacia. La sesión terminó sin ningún acuerdo y sin que el bloque de los países aliados de Estados Unidos anunciara las nuevas sanciones contra Rusia que hoy prometieron desde sus respectivas capitales y que supuestamente se concretarán en las próximas horas.