PACMA acusa a la justicia de retrasar el proceso para que la resolución llegue cuando los cachorros beagles hayan sido sacrificados
El partido animalista ha pedido la recusación de la jueza por no aceptar la urgencia de paralizar un experimento previsto para este mes de marzo
Entrevista a Cristina García, vicepresidenta de PACMA por la denuncia de irregularidades judiciales en el caso de los 38 beagles
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Tres Cantos
PACMA denunció ante la Justicia presuntas irregularidades en el experimento de 38 cachorros de perro beagle que está previsto se desarrolle en los laboratorios de Vivotecnia en Tres Cantos. En la denuncia solicitaban la suspensión urgente del experimento hasta que se resolviera la causa, pero la Justicia no ha aceptado esta petición.
La vicepresidenta de PACMA, Cristina García, ha explicado que han denunciado ante el Consejo General del Poder Judicial esta decisión y también han pedido la recusación de la jueza que instruye la causa. García insiste en que la urgencia está en que el propio Parc Científic de Barcelona ha anunciado que el experimento se realizará durante este mes de marzo.
PACMA denuncia además que se ha producido una filtración de una resoluciones judiciales, que dan 10 días hábiles a la acusación para responder a la denuncia, “alargando el proceso judicial hasta finales de marzo”. A este tiempo, habrá que sumar, explica García, el que tarde el propio tribunal en resolver la causa, con lo que la sentencia podría llegar cuando el experimento ya se haya ejecutado y los cachorros de perros hayan sido sacrificados.
PACMA está convencido que todo el proceso judicial está lleno de excusas e impedimentos formales con el objetivo de dilatar “desproporcionadamente” la resolución para que la petición principal de su denuncia; “la suspensión inmediata del experimento” no tenga sentido.
PACMA reconoce ver pocas salidas para salvar a estos cachorros de beagles, más allá de la voluntad del Parc Científic de Barcelona de cancelar la experimentación con ellos.
García cree que se están convirtiendo en un icono de lo que representa la experimentación con animales y “el mercadeo de las subvenciones públicas”, en este caso de la Unión Europea. Afirma que han detectado indicios de presuntos delitos de corrupción, tráfico de influencias y prevaricación.
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