Las consecuencias de la inflación, en cifras: los españoles pierden 16.700 millones y se frenará el consumo y la creación de empleo

La Fundación de Cajas de Ahorros Funcas ha revisado a la baja su previsión de crecimiento económico para 2022 en 1,4 puntos, hasta el 4,2%, por el impacto de las consecuencias de la guerra de Ucrania en un contexto de elevada inflación que mermará la renta disponible de los hogares en 16.700 millones de euros y dañará el consumo. En rueda de prensa para presentar sus previsiones macroeconómicas para 2022 y 2023, Funcas ha proyectado una inflación media para el presente ejercicio del 6,8% frente al 4,6% de su anterior escenario. El director de Coyuntura de Funcas, Raymond Torres, ha explicado que la subida de precios reducirá la renta disponible de los hogares en 16.700 millones de euros, lo que frenará el consumo, aunque con la incógnita de cuánto del ahorro embalsado en la pandemia puede destinarse a paliar esa pérdida de poder de compra por la inflación. Al detalle del PIB, Funcas prevé que el consumo de los hogares aumente un 3,8% este año, frente al 4,9% de sus proyecciones previas. Junto a esto, la complicada coyuntura internacional también frena el crecimiento de la inversión en equipo y de los mercados de exportación. «De aquí a finales de año la economía crecerá solo un 1,1% por la crisis de Ucrania», ha apuntado el director general de Funcas, Carlos Ocaña, quien ha advertido de la elevada incertidumbre internacional en la que enmarcan estas proyecciones. «No se espera ningún trimestre en negativo (...) no contemplamos la estaflación», ha añadido Torres, que ha afirmado que siguen tirando de la economía algunas «fuerzas del rebote» como el ahorro acumulado, el turismo y los fondos europeos. Con estas nuevas cifras, ha recordado Ocaña, el PIB terminará 2022 aún 2,5 puntos por debajo del nivel previo a la pandemia de la COVID. De cara al año que viene, Funcas prevé que el PIB crezca un 3,3%, dos décimas menos de lo esperado, y que la inflación media anual se sitúe en el 2,8%. «Sería el próximo año cuando la economía española recupere el nivel de PIB de 2019. Para volver a la actividad prepandemia en 2022, el PIB debería crecer un 6,7%», añaden. Por su parte, el gobernador del Banco de España ha apuntado que el 20% de los hogares más pobres gastan una cuarta parte de sus ingresos en energía y alimentación, advirtiendo así de que esta inflación recae sobre todo entre los más pobres, ya que los que más tienen no gastan tanto en esas dos cosas. Funcas ha apuntado que el plan de choque ante las consecuencias de la guerra de Ucrania aprobado por el Gobierno puede amortiguar en un punto el aumento del IPC para este año y evitar llegar a una inflación de doble dígito en los próximos meses. En rueda de prensa este miércoles para presentar sus proyecciones para 2022 y 2023, el director general de Funcas, Carlos Ocaña, ha explicado que el conjunto de medidas aprobado este lunes, y que incluye rebajas en carburantes, puede restar «en torno a un punto porcentual» de aumento de IPC, pasando del 6,8% al 5,8%, en términos medios para 2022. Por su parte, el director de Coyuntura de Funcas, Raymond Torres, ha apuntado que estas medidas «pueden llevar a que la inflación encontrara un pico entre este mes y el mes que viene» y «podrían evitar una inflación a doble dígito». Según el dato avanzado este miércoles por el INE, la inflación en España escaló en marzo hasta el 9,8% respecto al mismo mes del año anterior, 2,2 puntos por encima de la tasa registrada en febrero (7,6%) y la más alta desde 1985. «Se trata de niveles muy elevados de inflación», han advertido desde Funcas que calcula en 10.000 millones el incremento de gasto que supondrá la subida de las pensiones conforme a la inflación el año que viene. uncas advierte además de las medidas aprobadas por el Gobierno para hacer frente a la crisis son «costosas» y «no pueden ser ilimitadas», en una situación de endeudamiento de las cuentas públicas y el previsible aumento de los costes de financiación. Para la Fundación de las Cajas de Ahorros las incertidumbres del entorno geopolítico son muy elevadas con un posible empeoramiento del conflicto bélico e, incluso en un escenario de rápido desenlace, advierten de que perdurarían «dos legados» de esta crisis. En primer lugar, una inflación subyacente superior al 3% y que tiende a crecer y, en segundo lugar, un déficit público exacerbado por la doble crisis pandémica y energética. En cuanto al empleo, Funcas prevé que crezca a menor ritmo que en 2021, en consonancia con la desaceleración de la economía, con 473.000 puestos de trabajo creados hasta 2023, lo deja que la tasa de paro en el 13,8% este año y por debajo del 13% el próximo. Sobre el déficit público espera que baje al 5 % este año y todavía sea del 4,5 % en 2023; mientras que la deuda pública, por su parte, superará el 112 % del PIB en 2023. En cuanto a la política monetaria, Funcas proyecta que el Banco Central Europeo (BCE) comience a incrementar los tipos de interés este año y realice varias subidas más a lo largo de 2023, de modo que el «euribor a un año se situará en positivo a lo largo de la segunda mitad de 2022».

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Funcas estima que el plan del Gobierno para hacer frente a la crisis solo bajará un 1% la inflación

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