Inversores proyectan un gran área comercial y de ocio en Aranda
Se buscan 50.000 metros cuadrados. Rubén Madrigal, de Hunter Properties, está tratando de hacer viable una iniciativa privada cuyo principal obstáculo podría volver a ser la lentitud administrativa
Aranda de Duero / Pinterest
Aranda de Duero
Aranda de Duero podría contar en los próximos años con un gran área comercial y de ocio si fraguara el posible interés de la iniciativa privada en invertir en la capital ribereña en un terreno de unos 50.000 metros cuadrados. Esta iniciativa está encontrando su gancho en Rubén Madrigal, gerente de Hunter Properties, que lo ha adelantado en la SER. "Estamos trabajando en ello porque es complicado. Llevo ya 30 años en el sector desarrollando suelo y trayendo empresas, y durante muchos años hemos trabajado fuera. Suelo hay y no me niego a nada que sea traer dinero a Aranda, me ha hecho mucha ilusión. Esto se traduciría en que la gente joven y no tanto, no tuviera que irse a Madrid a comprar, revitalizaría la ciudad y la haría más atractiva para que haya gente que se quede aquí y no se marchen a otras ciudades, como pasa con bomberos, policías, médicos o profesores. Cualquiera tristemente se marcha porque carecemos de una oferta de ocio", defiende Madrigal.
Charla con Rubén Madrigal, de Hunter Properties
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En concreto, explica que "la empresa con la que lo gestiono suelen llevar tiendas grandes de unos 1.000 metros, bricolaje, informática, deporte... No quiero explicar mucho más porque no puedo dar marcas ni nada, pero eso, sitios de comida rápida, galería comercial... ". Sin embargo, uno de los problemas que esta idea podría encontrar frontalmente sería la lentitud de la administración local, que actualmente tarda en ocasiones hasta dos años en conceder una licencia. "Cuando le explicas los problemas del Ayuntamiento, con qué animo le digo a un inversor que haga 2-3 millones de inversión y que el consistorio va a ser ágil si no va a ser así. Hay que ser sincero y claro", asevera el gerente de Hunter.
A pesar de ello, Madrigal trata de ser optimista. "Yo sí lo veo y quiero pensar que va a ser así, pero tengo mis reservas también. El impedimento es el terreno porque en un PGOU no se contemplan estos suelos, es que es increíble que en la campa de las Dominicas por ejemplo solo haya dos suelos dotacionales -Lupa y McDonald's- porque esa gente que vive en la zona necesita establecimientos", recuerda.
Romper el nuevo PGOU
Por otro lado, y centrándonos en la parte urbanística, el gerente de Hunter considera que es más positivo romper el PGOU que lleva acumulando retrasos históricos -porque conlleva muchas deficiencias y problemas- y rehacerlo, aunque suponga, tristemente, una pérdida de los 400.000 euros que se han empleado en él. "El Plan General de Ordenación Urbana es una herramienta necesaria, pero no se ha estudiado detenidamente. Faltan opiniones expertas, y muchas carencias no se han tenido en cuenta. Falta suelo dotacional y de equipamiento en el polígono industrial, Eras de Santa Catalina es enorme y habría que fraccionarlo para que fuera más viable, y muchas cuestiones más. Y viendo que se va a aprobar así, es mejor que no se haga, se han gastado 400.000 euros pero no sirve de nada. Va a quedar en la que estamos, llevando 21 años trabajando sin plan. Llegado a octubre si no se adapta con el de la Junta, volveríamos a trabajar con el de 2001. A día de hoy trabajamos con lo más restrictivo de los dos y con inseguridad y precaución. Y encima, sigo dudando de que el nuevo plan se apruebe antes de octubre", asegura, a la par que critica que exista suelo industrial "pero no dotacional ni equipamiento, ni se contemplen restaurantes ni hoteles ni entidades financieras en el polígono, cosas que el resto tienen... Aquí no se piensan las cosas antes de hacerlas".
La Azucarera, inasumible
También ha hablado Rubén sobre la Azucarera, que se propuso como un lugar precisamente de ocio o educación o cultura a futuro para Aranda. Asevera que "tuve en venta hace 17-18 años. Es de Ebrofoods. Un terreno privado de uso industrial. Primero sería un terreno caro y cambiar el uso que en Aranda serían años de tramitación, con lo cual no tiene sentido. Es que parece que estamos en campaña electoral, e igual se lanza para tapar otras cosas que no se están haciendo", sentencia, recordando la parálisis de la oficina de obras, en la que "ha entrado un gran hombre, pero no sé si será suficiente" y en la que tener mucho movimiento "supondría generar más dinero para Aranda".
