Así se vivía en el año 1000

Nos guarece de la lluvia el pórtico de la Iglesia de San Vicente de Vitoria. Estamos en dónde sabemos se ubicaba la primera ermita de Gasteiz. Es nuestra puerta de entrada a la Vitoria de hace un milenio y nuestro guía en este viaje va a ser el investigador y arqueólogo de la UPV, José Luis Solaun. "San Vicente sería una magnífica caja negra para saber más de los orígenes de la ciudad", señala.

Sabemos que Gasteiz se situaba en lo alto del cerro, donde ahora está Villasuso. Y, según nos cuenta Solaun, "lejos de la imagen que tenemos de calles ordenadas, hay que pensar en una trama urbana con tres calles pero con las casa dispersas de manera irregular y con espacios de huerta".

Se estima que entonces Gasteiz contaba con una unas 80 casas y que en ella podían vivir unos 350-400 vecinos. En el siglo XV, ya con más certeza, sabemos que la ciudad ya rondaba los 4500 habitantes. "Las casas se podrían parecer al edificio de El Portalón, aunque con materiales más efímeros", nos cuenta.

¿A qué se dedicaban los gasteiztarras de la época? Aunque en el imaginario popular en época medieval la gente se dedicaba a trabajar la tierra, lo cierto es que había más oficios. De hecho, una de las principales actividades en Gasteiz era el trabajo del hierro. Los herreros que se situaban en la actual calle de las Escuelas que se denominaba calle de la astería, haciendo alusión a puntas de lanza. De hecho, nos cuenta Solaun "había una famosa lanza, 'las alavesas', con la que se equipaban a los tercios españoles".

Sobre su dieta, sabemos que cultivaban y consumían productos hortícolas, legumbre, cultivaban cereales para hacer pan. Consumían carne, sobre todo oveja y vaca. "Sorprende el escaso consumo de cerdo, muy presenta ahora en la dieta vasca", nos cuenta el investigador y "consumían pescado, fundamentalmente de río".

Hay algo que no ha cambiado mucho. "Se consumían muchas habas. Los pucheros de habas tan tradicionales en nuestra ciudad", nos cuenta José Luis Solaun.

Comer como cerdos

Y sobre nuestros usos y costumbres en la época, nos ha llegado un documento, el códice calixtino, la primera guía de viaje que fue escrita por un moje francés en su camino a Santiago, en la que se nos describe y, por cierto, nos no salimos muy bien parados. "Los navarros y vascos torpemente visten y torpemente comen y beben". "Si los vieres comer, los considerarías perros o cerdos. Si los oyeres hablar, te acordarías de los perros que ladran, pues tienen una lengua de todo punto bárbara. Navarro o vasco matan, si pueden, por una moneda a un galo". Así de bien nos dejaba.

Sabemos, además, que el día se articulaba entorno a los toques de campana. Aunque no se sabe cuantos podía hacer en el " siglo XVIII había entre 7 y 10 que marcaban el ritmo del día". El día a día de la época se articulaba entorno a la luz del sol y la luz de cada estación.