En medio de la tensión política por el presunto espionaje a independentistas con el programa Pegasus se ha vivido un momento de distensión durante la sesión de control al Gobierno por un lapsus cometido por el presidente del Gobierno. Pedro Sánchez, que acababa de responder a la pregunta parlamentaria de Santiago Abascal, contestaba ya a Gabriel Rufián, que le ha preguntado si el Ejecutivo «va a investigar» ese presunto espionaje. «Señor Abascal...», ha dicho Sánchez a Rufián. Al percatarse del error, y ante los murmullos y risas de las bancadas, el presidente del gobierno se ha disculpado con el republicano en un tono distendido: «Hay lapsus imperdonables y este lo es». La frase ha disparado las carcajadas en el hemiciclo, incluidas las de Rufián. Minutos después, en tono aún laxo, el portavoz de ERC decía: «Que me espíen, vale; pero que me llamen Abascal me fastidia». Antes, la sesión de control la abrió la popular Cuca Gamarra, que ha insistido en que Sánchez debe bajar impuestos: «Hay margen para bajar impuestos de forma selectiva y temporal». El PP pide la bajada del IVA para la luz y el gas y la deflactación de la tarifa del IRPF. Como respuesta, el presidente del Gobierno ha pedido al PP «formalmente» su apoyo al real decreto de medidas para paliar los efectos económicos de la guerra en Ucrania, cuya convalidación votará este jueves el Congreso. Desde los grupos independentistas se ha reprochado al Gobierno el supuesto espionaje con el programa Pegasus. PNV, Ciudadanos, CUP y Junts per Catalunya han instado al Gobierno a constituir una comisión de investigación, algo que también pide la ministra de Defensa, Margarita Robles: «Podemos hablar de Pegasus sí o Pegasus no», pero cuando «salga todo» algunos a lo mejor «tendrán que callarse». Robles se ha defendido asegurando que al Centro Nacional de Inteligencia le pueden atribuir hasta la muerte de Manolete”, sin que exista “causa probatoria”.