"Hablaba mirándome a los ojos": la lección de vida del papa Francisco a un sacerdote gaditano

Cádiz

Iván Llovet estaba cursando su formación como hombre de la Iglesia en Roma. Fue durante esta época cuando pudo conocer al papa Francisco e incluso mantener una breve conversación con él. Una charla informal que le regaló un recuerdo y una lección que ahora tiene aún más valor tras el repentino fallecimiento de Jorge Bergoglio.

Este sacerdote gaditano, párroco De la Iglesia de San Lorenzo, ha relatado en Hoy por Hoy Cádiz su encuentro con Francisco, que se produjo durante una de sus audiencias públicas. Allí compartió algunas reflexiones con el sumo pontífice, que fue "muy cercano, de la mano agarrado, con esa fuerza que transmitía", ha contado Llovet, que ha subrayado que Bergoglio no hablaba "con un discurso vacío sino mirándome a los ojos y demostrándome que estaba allí conmigo".

Fue una conversación que duró unos cinco minutos en los que el sacerdote sintió al papa "como un padre y un pastor que me confortaba y me animaba a seguir adelante 'haciendo lío', con una iglesia cercana a los pobres y a los descartados de la sociedad", ha relatado.

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Un recuerdo hecho foto

Tuvo la suerte de que alguien pudo hacerle una fotografía mientras conversaba con él. En ella se ve al papa en silla de ruedas y a Iván Llovet agachado, mirándole con admiración y agarrando su mano. Fue en esa circunstancia cuando Francisco le regaló un consejo para toda la vida: "Iván, sigue adelante, no te canses. Y si alguna vez te equivocas lo importante es levantarse, confesarse y seguir adelante, porque el Señor nos necesita y este mundo necesita su evangelio", le dijo Bergoglio.

A pesar de que estaban rodeados de personas, el sacerdote gaditano ha hecho hincapié en que Francisco se detuvo con ellos y mostró una enorme humanidad. Esa ha sido precisamente una de las señas de identidad del papado del sumo pontífice: la cercanía y la naturalidad.

La huella del papa

Por eso Iván Llovet está convencido de que este papa ha dejado una huella especial. "Todo ser humano siempre deja una huella, porque todos somos irrepetibles a ojos de Dios, pero el papa ha hecho historia porque nos ha vuelto a ilusionar con el evangelio de Jesucristo para que nos acerquemos a lo que Jesús transmitía y vivía".