El Ejército ha construido en Córdoba casi 1.200 piezas de recambio con la tecnología de impresión 3D de Sicnova

Córdoba

En apenas un año, el Centro de Fabricación de Piezas que el Ejército de Tierra ha instalado en el Parque y Centro de Mantenimiento de Vehículos Ruedas nº 2 de El Higuerón (Córdoba)—la instalación que se ha designado como antecedente directo a la futura Base Logística—, ha producido 1.174 piezas a través de impresión 3D avanzada.

Componentes que se han usado en vehículos de infantería motorizada o carros de combate, entre otras aplicaciones; y que surgen gracias al acuerdo entre la empresa jienense Sicnova y el Ministerio de Defensa. El convenio, superior a los 82 millones de euros, designa a la compañía andaluza para desarrollar un plan de fabricación aditiva de piezas y recambios para las Fuerzas Armadas .

La elección de Córdoba como sede de la base 'General Varela' fue clave en la toma de decisiones de la empresa, reconoce Ramón González, responsable de Fabricación Avanzada de Sicnova. "Si Defensa no hubiera optado por esta ciudad, de forma muy probable no hubiéramos abierto un centro de producción allí", comenta a La SER desde la Feria Internacional de la Defensa (FEINDEF) que se ha celebrado desde este lunes en Madrid.

Aunque en la capital cordobesa también han encontrado la ventaja de la cercanía con la Brigada Guzmán el Bueno X, asentada en Cerro Muriano, "a la que prestamos un apoyo directo con suministro de piezas", explica el responsable de la compañía. Siete de los cuarenta profesionales especializados en el sector Defensa de Sicnova trabajan en Córdoba, aunque la compañía no descarta ampliar plantilla en el futuro, "pues la demanda de productos empieza a ser más importante cada día y, además, es más ágil, gracias a la estandarización del proceso de solicitud de piezas que ha hecho el Ejército recientemente".

Un proceso en el que ha intervenido directamente el capitán Carlos Peñalba. En declaraciones a Radio Córdoba, enfatiza cómo el trabajo que se está desarrollando permite "tener una mayor autonomía como fuerza terrestre, algo crucial". En este sentido, reconoce que "siempre vamos a depender de la industria y de grandes compañías, pero estamos avanzando en dos direcciones", explica, "la primera es aumentar la cantidad de equipamiento de fabricación o diseño nacional; y la segunda es ganar la capacidad de fabricar nuestros propios repuestos".

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Con la impresión en 3D de alta tecnología, las Fuerzas Armadas evitan costes, tramitación y tiempos de espera. "Con estas máquinas podemos producir algunos de las piezas de nuestros carros de combate en 24 horas, mientras que si recurriésemos a la industria, a la aprobación de un expediente de contratación y a su compra, podríamos estar hablando de un año hasta que se reciba", detalla Peñalba.

Además, esta tecnología supone una solución temporal para otro de los grandes retos del Ministerio de Defensa, que en algunas unidades cuenta todavía con vehículos y equipamientos bastante anticuados. La localización en el mercado de recambios para los mismos es un reto que se complica día tras día. Sin embargo, si se realiza un modelado en tres dimensiones de la pieza, las impresoras de Sicnova pueden empezar a trabajar.

Y lo hacen con una amplia variedad de materiales, especifica Ramón González, "desde acero, acero inoxidable, aluminio o titanio, así como polímeros flexibles, polímeros reforzados con fibra de carbono o fibra de vidrio o incluso plásticos compatibles con el contacto corporal del soldado". Esta es, precisamente, una de las vías de innovación de la empresa, puntualiza, "pues según nos vaya demandando el Ejército, podemos desarrollar tecnología para trabajar con nuevas materias primas".

Con todo, en los últimos doce meses, el Centro de Fabricación de Piezas del Ejército en Córdoba ha recibido 247 solicitudes para 'clonar' piezas, de las que 199 se han aceptado tras evaluar su viabilidad. De esta forma, se han introducido en la cadena logística de la fuerza terrestre un total de 1.174 piezas "que han venido a solucionar las carencias que tenían nuestras unidades operativas de forma rápida", concluye el capitán Carlos Peñalba.