El Mercado de la trufa llega a Huesca con el objetivo de dar a conocer el "oro negro" de la provincia
Quieren exponer las cualidades organolépticas y saludables del hongo más preciado de los campos pirenaicos
Huesca
El Mercado de la trufa de Graus llegará a Huesca el fin de semana del 17 y 18 de febrero. En el Hotel Pedro I habrá charlas, showcooking, degustación, cata con vinos del Somontano y venta de trufa fresca y otros productos trufados. Con este acto se pretende avanzar en uno de los retos que se han marcado desde la Diputación Provincial de Huesca, la comarca de la Ribagorza o la Asociación de Truficultores de Aragón, y que es promocionar el producto y darlo a conocer.
José Cebollero, diputado de Desarrollo Económico, recordaba que el 95% de la producción se destina a la exportación, en Francia o Italia, pero hay que darla a conocer también en Huesca o Zaragoza.
En la Ribagorza, la trufa es un recurso propio que les da singularidad y representación, ha pasado de ser algo secundario a convertirse en la actividad principal de muchas economías familiares.
Roque Vicente, presidente de la comarca de la Ribagorza, recordaba que los retos que se marcan desde las instituciones pasen por seguir profundizando en la investigación de la trufa para ser más eficaces; dar a conocer cada vez más al gran público lo que es la trufa, y estimular el consumo rompiendo el tópico de que es un producto caro, solo apto para unos pocos.
El mercado de la trufa de Graus es el más antiguo de Aragón. Su llegada a Huesca es, según David Royo, presidente de la Asociación de Truficultores de Aragón, un cambio de tendencia en la promoción que se venía haciendo. La temporada no ha sido muy buena y se ha caracterizado por la escasez de producto por las condiciones climáticas del verano, con falta de agua y altas temperaturas. No ha sido una buena campaña para los productores, pero ha logrado un producto con mucho aroma.
Los truficultores echan en falta una legislación sobre la trufa. Recuerdan que más del 75% de los productos que se venden como “trufados”, solo utilizan aromatizante y no llevan trufa negra, cuando en Francia, por ejemplo, es obligatorio que lleven un 3%. Por ello, la necesidad de luchar contra el intrusismo, y de conseguir que el consumidor esté bien informado.
MERCADO DE LA TRUFA EN HUESCA
Las jornadas van dirigidas al público en general y, particularmente, a restauradores, distribuidores, tiendas especializadas y a todos los profesionales cuya actividad gira en torno a la producción y la gastronomía.
Junto al mercado estrictamente dicho, donde los truficultores venderán trufa junto a otros productos como la ternera pirenaica, la longaniza de Graus de la Asociación y particularmente de Melsa, los vinos del Somontano, el aceite de Ecostean y los Quesos de Guara, se degustarán tapas con trufa elaboradas por la cocina del Hotel Pedro I de Aragón. Como ha destacado el presidente de la Asociación de recolectores y cultivadores de trufa de Aragón, David Royo, “la trufa es un condimento y como tal la mayoría de las veces que lo consumimos acompaña a otro alimento. Por ello creemos que la colaboración con otros productos es fundamental”.
El Mercado Itinerante de la Trufa ofrecerá charlas de María Lahuerta, responsable de producto del mercado de la trufa de Graus, David Royo (presidente de Trufa Negra D’Aragón) y Eva Gómez (ingeniera agrónoma e investigadora del Centro de Investigación y Experimentación en Truficultura). Junto a la historia de la trufa en nuestra provincia expresada por Lahuerta, David Royo desvelará cómo sacar el máximo partido a este hongo.
Además, Carlos Moliné, chef del Restaurante Red Wagon de Anzánigo, protagonizará sendos showcooking el sábado a las 12:30 y el domingo por la mañana.
A las 18:30 del día 17, habrá además una cata de la Denominación de Origen Somontano con vinos con personalidad propia y trufa, a cargo de la sumiller Raquel Latre.
El domingo, que ofrecerá mercado y actividades por la mañana, servirá para la presentación del informe sobre los productos trufados y David Royo volverá a exponer la importancia de aprovechar al máximo la trufa, un hongo accesible para los bolsillos con una correcta utilización.