La Audiencia envía a Le Senne (Vox) al banquillo por un delito de odio
El presidente del Parlament subraya que sigue amparado por la presunción de inocencia y que actuó con la intención de aplicar el Reglamento
Palma
La Audiencia provincial de Palma envía al presidente del Parlament balear al banquillo de los acusados. El tribunal de la sección segunda ha rechazado el recurso presentado por el ultra Gabriel Le Senne (Vox) contra la decisión de un juez de instrucción de procesarle por un presunto delito de odio al romper una fotografía de varias represaliadas del franquismo durante un pleno de la cámara. La Fiscalía también se opuso al procesamiento de Le Senne al considerar que no existe el delito de odio.
El tribunal ha desestimado todos los motivos alegados por la defensa del diputado de Vox y considera que la suficiencia de los indicios del episodio investigado se tienen que resolver en la fase de juicio oral. El tribunal cree que no es posible archivar la causa porque las cuestiones fácticas planteadas por Le Senne son propias de una vista pública.
La defensa del investigado, dicen los jueces, no ha solicitado que se realice una valoración sobre si los hechos pueden ser considerados constitutivos de delito. Además, añaden que el recurso presentado no incide en la relevancia penal de los hechos investigados, sino en cuestiones relativas a la intencionalidad del investigado.
Solo las acusaciones populares y particulares han decidido seguir con el proceso después de que la fiscalía reclamase su archivo, al considerar que Le Senne no había incurrido en un delito de odio.
Las acusaciones piden desde 16 meses de cárcel hasta cuatro años, así como multas por valor de 201.900 euros e indemnizaciones que suman más de 150.000 euros. También solicitan inhabilitaciones de varios años para ejercer cargos públicos.
Finalmente, Le Senne se sentará/no se sentará en el banquillo de la Audiencia Provincial por los hechos ocurridos en junio del año pasado durante el pleno que debatía los trámites para derogar la ley de Memoria.
El presidente de la cámara terminó arrancando una fotografía de 'Les Roges del Molinar' que la diputada socialista y vicepresidenta segunda de la cámara, Mercedes Garrido, había colocado en la tapa de su ordenador portátil. Le Senne terminó expulsando del pleno a Garrido y su compañera de mesa, la diputada socialista Pilar Costa. El Tribunal Constitucional ha admitido un recurso de amparado presentado por ambas diputadas contra la decisión del presidente de expulsarlas de la cámara.
El presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, ha hecho hincapié este lunes en que sigue "amparado por el derecho de la presunción de inocencia" después de conocerse que va a ser juzgado como presunto autor de un delito de odio por romper una imagen de Aurora Picornell y las Roges del Molinar en un pleno.
Así, después que la Audiencia Provincial haya desestimado el recurso presentado por la representación letrada del presidente de la Cámara autonómica y la Fiscalía, Le Senne ha mantenido su "convencimiento de que actuó en aquel pleno en el ejercicio de sus funciones, sin otra intención que la de aplicar el Reglamento, respondiendo a quejas de grupos que representan la mayoría de la Cámara y tras recabar asesoramiento legal".
Además, el presidente de la Cámara balear en un escueto comunicado ha reafirmado su "voluntad de colaborar con la Justicia en el acto del juicio para concluir este procedimiento lo antes posible".
