Un perjuicio para los niños canarios

Canarias

La Consejería de Educación del Gobierno de Canarias ha publicado ya en el Boletín la oferta pública de empleo (OPE) para más de 4.000 profesores y eso es bueno. Estamos hablando de prácticamente todos los interinos que tenemos aquí. Ahora bien, lo que no es tan bueno es que el resto de autonomías no han hecho lo mismo. Se han guardado muchas plazas, supuestamente para que no lleguen opositores de otras regiones. Con esto se corre el riesgo de que a las islas vengan de fuera y de forma masiva, y sin venir al concurso, solo enviando currículo. Y esto puede quitar plazas a profesores canarios, y algunos llevan más de veinte años como interinos y no es razonable que encima no tengan en cuenta todos los cursos trabajados sino los últimos 10 años.

Y no es lo único malo que tienen las bases, porque además no se tiene en cuenta alguna condición técnica para la discriminación positiva de los docentes del archipiélago que llevan muchos años trabajando en las islas. Una fórmula podría ser valorar sus conocimientos sobre el lugar donde van a trabajar. Vamos, de Geografía e Historia de Canarias.

Miren, claro que tenemos que abrir la mano a jóvenes docentes con alta preparación, pero eso para otras citas anuales de oposición, que debieran ser anuales para evitar este lío monumental. Lo que no se puede permitir es que un profesor que lleve más de 20 años sacando las castañas del fuego a la Consejería ahora se quede fuera o se ponga en cuestión su profesionalidad.

Si Manuela Armas, consejera de Educación del Gobierno de Canarias, no consigue alguna solución seria y definitiva para los profesores interinos canarios tendrá que paralizar el concurso o reestructurarlo. Lo otro es perjudicar a los canarios y canarias. La consejera sabe que las plazas ganadas por gente de la península se quedarán vacantes en poco tiempo porque ellos querrán estar cerca de casa y el perjuicio no serán tan solo para los opositores canarios, sino para los niños de las islas.