"Ni los cerdos merecen esto": la sanidad canaria entre las más privatizadas de todo el país

Canarias

Canarias figura entre las cuatro comunidades con un grado más elevado de privatización de la sanidad de todo el país y ha permanecido en ese grupo al menos los últimos cuatro años. Son datos oficiales hechos públicos el año pasado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, que coloca a Canarias en ese grupo junto a Cataluña, Baleares o el Madrid, la comunidad con la sanidad más privatizada. Son datos recogidos durante el primer año de la pandemia y no incluyen los relativos a la utilización de los fondos Covid.

Según el octavo informe sobre la privatización sanitaria de las comunidades autónomas de 2022, Canarias gasta 151 euros al año por persona en seguros privados. Un 7,1% del gasto sanitario está dedicado a la contratación con centros privados y casi un 5% de las camas hospitalarias son privadas: en esto nos supera Andalucía, con el 10% de camas privadas, Madrid con el 13% o Cataluña, que tiene casi un 40% de camas privadas. Aunque los hospitales públicos están bien equipados, más de la mitad del porcentaje de equipamiento de alta tecnología sanitaria en Canarias está en hospitales privados, superando a Madrid o Cataluña. Aun así, solo el 30% de la sociedad canaria elegiría la sanidad privada si tuviera la opción de elegir.

Doce horas esperando a ser derivada a un hospital privado

Milagros Pérez fue operada bajo un concierto sanitario en una clínica privada. Su operación de rodilla salió bien, pero hace unos días tuvo que ingresar de nuevo por una infección. Está hospitalizada en una cama privada derivada desde el Hospital Universitario de Canarias. Según denuncia su hija, estuvo más de diez horas en las urgencias del Universitario de Canarias, en Tenerife, hasta que por fin la derivaron al centro privado donde la habían operado. "Mal no, muy mal. Estuve doce horas en una silla esperando por el transporte a la clínica privada, lo pasé fatal", denuncia Milagros Pérez. "La gente me miraba y me dio por llorar, ni los cerdos se merecen lo que me hicieron ayer", lamenta Milagros.

Cuando notó síntomas de una posible infección, se puso en contacto con la clínica privada donde fue operada, que en primera instancia se negó a atenderla. Acudió al hospital público y allí esperó doce horas. Finalmente fue ingresada en el hospital privado, como pedía desde un primer momento. Milagros Pérez y su hija, Raquel García, denuncian la indefensión ante la privada y el desamparo de la pública. "El trato que le dieron en la sanidad pública fue nefasto. La dejaron sin atender durante casi doce horas", explica Raquel. No tienen ninguna queja al respecto de la atención médica que han recibido, sino de las larguísimas esperas, la descoordinación entre la privada y la pública y la falta de información que le proporcionaron. A pesar de las carencias de la pública, la mayoría de los canarios sigue confiando en la calidad de su funcionamiento.

La lista de espera más larga de España para concertar cita con un especialista

Canarias no ocupa un buen lugar en el mapa de la desigualdad sanitaria de España. En atención primaria, el Archipiélago es una de las cinco comunidades que no ofrece datos sobre la situación, tampoco lo hacen Murcia, Euskadi, Cantabria o Asturias. "Tenemos hasta quince y veinte pacientes fuera de hora. Hay compañeros que están terminando con cincuenta o sesenta pacientes al día. Estamos sobrecargados, ha sido un incremento brutal de consultas sin un incremento paralelo de recursos", explica Ana Joyanes, portavoz de la asociación de los médicos de atención primaria. La lista de espera para pruebas complementarias: hay 7.899 personas esperando por una ecografía en Canarias y en La Palma los pacientes esperan un año y medio por una endoscopia.

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