El CD Tenerife se aferra a la fe y gana con autoridad en Gijón

Gijón

Para el CD Tenerife de Cervera solo hay un lema: competir cada semana como si fuera la última. En Gijón volvió a demostrarlo cuando peor pintaba el partido y superando el gol de penalti (otra vez) del equipo de Rubén Albés nada más empezar la segunda parte. Dos tantos en apenas cuatro minutos de Sergio González y Waldo Rubio en los minutos 68 y 71 le dieron la vuelta a la tortilla y remató en el minuto 83 con el tercero obra de Enric Gallego. Tres gladiadores como Gallego, González y Rubio fueron los ejecutores de una nueva obra maestra con el sello de Álvaro Cervera que supo dar un giro de timón al encuentro cuando, a falta de media hora, hizo tres cambios de una tacada y revitalizó a los suyos, que se engancharon a la vida con el 1-1 de Sergio de cabeza tras un córner.

No se da por liquidado

El caso es que el triunfo en El Molinón, con el que se llega a los 31 puntos, le da al CD Tenerife argumentos para seguir creyendo, pese a que cada jornada que pasa se acerca el final de campeonato. Con 24 puntos por disputar, saben los blanquiazules que juegan cada semana en el alambrelos, pero la unidad que muestra el grupo, junto al empuje de la afición que no tira la toalla, hacen creer en el milagro de una permanencia que hace unas semanas estaba a 17 puntos y ahora se empeña en recortar a marchas forzadas el elenco tinerfeñista. Pase lo que pase, el amor propio y la lucha de este vestuario junto al liderazgo de Cervera y Perera, están fuera de toda duda y siguen adelante en la carrera contra el tiempo y los puntos.